VALLADOLID, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Carlos Fernández Carriedo, se ha mostrado convencido este martes de que nadie puede quedarse fuera de la solución a la crisis y menos, ha advertido, aquellos que forman parte del problema.
De este modo ha defendido Fernández Carriedo la necesidad de llegar a acuerdos y pactos con los grupos parlamentarios ofrecidos este martes por el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, en su discurso en el Debate sobre el Estado de la Región.
Fernández Carriedo, que ha destacado la "disposición, transparencia, detalle y profundidad" ofrecidos por Herrera en su intervención, ha reconocido asimismo que Castilla y León ha arrancado esta Legislatura de forma complicada, con destrucción de empleo y recesión, y ha deseado que pasados los cuatro años de mandato éste pueda concluir de manera muy distinta de modo que haya merecido la pena la adopción de unas medidas que exigen sacrificios.
El portavoz del Grupo Parlamentario Popular ha recordado que aún quedan tres años por delante por lo que ha considerado positivo hablar de lo que se puede hacer pensando en el futuro, "un acierto" del presidente Herrera en su intervención que ha centrado en su prioridad por el empleo, los servicios públicos, la ordenación del territorio, la austeridad y la participación.
En este sentido, ha recordado a los grupos que un Debate sobre el Estado de la Región no está para hablar de temas de actualidad sino para poner las luces largas en el horizonte de una Legislatura que termina en 2015.
"HAY PROYECTO"
"Hay proyecto en Castilla y León", ha aseverado Fernández Carriedo, que se ha remitido en concreto a las diez leyes, tres estrategias y 18 planes comprometidos por Herrera para el horizonte 2012-2013.
Del mismo modo, ha significado que Castilla y León parte con "ventajas de partida" como las económicas, al ser la comunidad autónoma con mejor comportamiento durante la crisis; sociales, por su elevada calificación de los principales servicios públicos; presupuestarias, por tener menos déficit y deuda; fiscales, al ser una de las autonomías con menos impuestos que la media, e institucionales, por su nivel de credibilidad en el conjunto de la sociedad.
A esto ha sumado una "ventaja adicional" en el ámbito del Diálogo Social, una seña de identidad de la Comunidad.
En este sentido, ha refrendado el "compromiso" y "responsabilidad" de Castilla y León "gobierne quien gobierne" y se ha mostrado convencido de que el actual Gobierno central es más sensible con los intereses de la Región, a pesar de "desencuentros" en sectores como el de la minería o de cierta "desinformación" en el CPFF.
