Señala que su intención es "consensuar los temas importantes y generales de la ciudad" y advierte de que este será su "último" mandato
ZAMORA, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Zamora, Francisco Guarido, ha reconocido que tiene "la impresión" de estar convirtiéndose en "un símbolo", aunque ha matizado que no pretende "ejercer como tal".
El único mandatario municipal de Izquierda Unida en una capital de provincia ha señalado, en una entrevista para Europa Press, que es "normal que se focalice" sobre él tras el éxito electoral, pero ha aseverado que sus intenciones "no son desbancar a nadie".
En ese sentido, el alcalde de Zamora ha afirmado que se conforma con ser un símbolo. "No vamos a dar el salto a la política nacional porque no tenemos tiempo, no por otra cosa", ha resaltado Guarido, que ha explicado que, a él y a su equipo, les gustaría "que la dirección federal de IU cambiara su orientación", pero que son "un grupo pequeño".
Por ello, Francisco Guarido ha abogado por centrarse "en el día a día", y ha sido claro al respecto: "No damos más de nosotros mismos". Por esa misma razón, los dirigentes de Izquierda Unida de Zamora han optado por no intentar hacerse con el control de la dirección regional tras la marcha de José Sarrión.
Al hilo de este asunto, Guarido ha recordado que "la corriente crítica a nivel autonómico tiene un apoyo en torno al 30%", por lo que la facción que representa Izquierda Unida de Zamora "es minoría". El alcalde de Zamora ha comentado que lo "normal" en Castilla y León sería una asamblea extraordinaria para que se volvieran a "marcar posiciones", pero ha dicho no saber nada al respecto.
