VALLADOLID, 25 Dic. (EUROPA PRESS) -
El escritor, músico y etnógrafo Joaquín Díaz firmará ejemplares de su última obra, 'Valladolid hace 100 Años', a partir de las 19.00 horas de mañana viernes en la librería Oletum de Valladolid.
La obra permitirá al lector, a través de fotografías antiguas y de reproducciones de carteles y de anuncios y a modo de guía, conocer cómo era la capital vallisoletana hace un siglo, según explicó el propio Díaz el pasado 3 de diciembre en la presentación ante los medios de comunicación.
La obra, editada por 'Castilla Tradicional', es según Díaz un "almacén de fotografías antiguas" que sirve "de guía" para conocer cómo se podía recorrer la capital vallisoletana hace cien años "contemplando lo mejor de la ciudad" como eran sus monumentos, sus comercios o sus personajes de relevancia. Se trata, en definitiva, de un "resumen amable" de lo que Valladolid "era hace cien años".
Al bucear en los diferentes archivos en busca de las imágenes que ahora se han recogido en este libro, algunas de ellas inéditas, el etnógrafo reconoció el cambio físico que en un siglo ha experimentado Valladolid ya que hace cien años "las construcciones más altas eran las chimeneas de las industrias" ya que los edificios no superaban las cuatro alturas, además de que ha podido comprobar que lo que interesaba a los vallisoletanos de aquella época "eran otros temas".
Así, por ejemplo, 1908 fue el año de la luz eléctrica ya que la Electra "hizo un importante esfuerzo por iluminar todos los lugares de Valladolid que debían de estar iluminados" como fue el teatro Calderón además de que construyó una subestación en Ferrocarriles del Norte.
Asimismo, Joaquín Díaz, que reconoció lo costoso que ha sido la elaboración de este libro, del que se distribuirán 2.200 ejemplares que se venderán a 22,90 euros, explicó que Valladolid "se fue transformando y pasó de ser un gran población del siglo XIX a una ciudad que imitaba a otras como París o Londres".
Esta transformación que ha experimentado la ciudad a lo largo de un siglo ha traído consigo la desaparición de monumentos y lugares emblemático como el teatro Pradera, ubicado en la actual plaza Zorrilla, junto al Campo Grande, y que es una de las "ausencias" que más lamenta Joaquín Díaz ya que era aquí donde solía quedar con sus amigos en su infancia.
Por ello, el autor de esta publicación aseveró que quienes tengan más de cincuenta años de edad "sólo reconocerán la ciudad en este libro por los grandes monumentos que han quedado".
Joaquín Díaz guarda otras 200 fotografías por lo que no descarta emplearlas en un nueva publicación que aborden otros aspectos de Valladolid como puede ser la educación a principios de siglo o la industria, aunque al respecto ya está trabajando en un proyecto con motivo del aniversario de la Cámara de Comercio.
