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VALLADOLID, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Castilla y León ingresó 501,1 millones de euros en 2013 por los tributos que gestiona, un 4,89 por ciento más que en 2012 (477,73 millones de euros), lo que supone que por primera vez en seis años la recaudación se incrementó respecto al ejercicio precedente.
Según han explicado desde el departamento que dirige Pilar del Olmo, a este incremento de la recaudación contribuyeron de "manera decisiva" tanto los impuestos tradicionales, que sumaron 416,2 millones a las arcas regionales (el 2,1 por ciento más), como los nuevos, que aumentaron su aportación el 28 por ciento hasta los 61,1 millones.
En concreto, el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales fue el que más fondos aportó a las arcas regionales, con 138,4 millones de euros, lo que implica una subida del 9 por ciento que refleja la actualización de tipos vigente desde el 1 de enero de 2013. A continuación se situó el de Sucesiones y Donaciones que, con 136,7 millones -el 4,3 por ciento más-, recoge la modulación por renta de la bonificación del 99 por ciento a familiares directos.
