VALLADOLID, 9 May. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha defendido que si el informe del secretario general del Ayuntamiento lo avala continuará con las intervenciones cuando considere oportuno en los debates de los plenos municipales, pues su intención es no dar "un paso atrás" ante lo que considera como una "estrategia de acoso y de ensuciamiento permanente de la vida pública" por parte del Grupo Popular.
Así lo ha aseverado el regidor socialista este miércoles, menos de 24 horas después de haber expulsado del Pleno municipal del Ayuntamiento al portavoz del Grupo Municipal del Partido Popular, Antonio Martínez Bermejo, por lo que ha definido hoy como una "alteración grave" del orden de la sesión al haber interrumpido su intervención varias veces para quejarse en voz alta de que el regidor hace uso del turno de palabra "a su antojo".
El alcalde ha recordado que el Grupo Municipal Popular requirió este martes en la sesión plenaria un informe del secretario general del Ayuntamiento sobre si el Reglamento municipal contempla la posibilidad de que el alcalde y presidente del Pleno intervenga en los debates cuando lo considere oportuno.
En primer lugar, ha añadido, esperará a conocer el informe del secretario, que entiende que "pondrá las cosas negro sobre blanco" y, si así lo avala, continuará con sus intervenciones en los debates porque ha aseverado que preside "esta casa, le guste al PP o no", a cuyos concejales ha reprochado que "llevan tres años" en la oposición "y todavía no se han enterado".
De hecho, ha considerado que en el informe del secretario "quedará absolutamente claro" que el alcalde puede hacer uso de la palabra cuando decida y que el PP debería saberlo, "porque ha gobernado 20 años y ha tenido un alcalde que ha intervenido cuando ha considerado en los plenos" y "nadie decidía por él".
En este sentido, ha criticado lo que interpreta como una "estrategia de acoso, de permanente ensuciamiento de la vida pública y de puesta en cuestión de la legitimidad democrática" por parte del Grupo Municipal Popular, algo que ha advertido de que no va a "consentir".
Puente ha apostillado que cuando estuvo en la oposición municipal habría "soñado con que el alcalde hubiese intervenido más en los plenos y debatiera", pues entiende que es "lo que quieren los representantes políticos" y "lo que piden los ciudadanos", quienes, en su opinión, no querrían que el alcalde permanezca callado.
Así, ha defendido que "todos alcaldes de España presiden los plenos" y, además de una función moderadora también ostentan la "dirección del debate" y pueden intervenir "cuando consideren oportuno", ya que ha puesto el ejemplo de que un Pleno municipal "no es el Parlamento", sino que es un órgano de gobierno de los ayuntamientos.
Por otra parte, ha insistido en que no ha expulsado a Martínez Bermejo por criticarle, pues ha ironizado con que si fuera así lo tendría que haber hecho "en cada sesión". Así, ha precisado que le ordenó salir del Salón de Plenos expulsar en cada decisión porque alteró "gravemente el orden del Pleno" al interrumpir al presidente pese a ser apercibido "hasta en tres ocasiones" de que si continuaba sería expulsado. "Si me hubiera llamado guapo a gritos, también lo habría hecho", ha recalcado.
Asimismo, ha explicado que, en segundo lugar se ceñirá "estrictamente" en la aplicación de los turnos de tiempo de los grupos, que serán de cinco minutos, ya que ha reprochado que "se quejan de trato injusto" cuando permite "hasta 10 minutos más".
