BURGOS, 5 May. (EUROPA PRESS) -
La Unión de Plataformas por la Liberalización de las Autopistas de peaje (UPLA) se ha constituido hoy en Briviesca (Burgos) y se ha marcado ya su primer acción concreta, la petición de una reunión con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para exigir que se libere la AP-1 cuya concesión concluye el 30 de noviembre.
Así lo ha señalado, en declaraciones a Europa Press, el portavoz de la Plataforma de Vecinos Afectados por la N-I de Burgos (AP-1), Rafael Solaguren, que ha incidido en que la "discriminación" es el denominador común de los territorios que soportan autopistas de peaje en diferentes puntos del Estado. "Nuestra intención es que esta sea la primera que se libere porque no hay ningún argumento lógico para continuar con ese modelo de negocio", ha insistido para avanzar en que también lo reclamarán para la AP-7, entre Tarragona y Alicante, y la AP-4, Sevilla-Cádiz, que finalizan su concesión en 2019.
