BARCELONA, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
La segunda jornada del Festival Internacional de Música Avanzada y New Media Art Sónar de Barcelona ha transcurrido la tarde de este viernes con una mayor afluencia de público, que ha sabido revertir en una mayor animación.
La segunda jornada ha comenzado siendo una sartén por el calor, y el hecho de estar al aire libre casi se ha vuelto en contra de la canadiense Jessy Lanza, que ha visto como el público se amontonaba en las esquinas sombrías y en cualquier rincón con tregua solar, dejando la inmensa pista verde vacía al centro, salvo sufridos fans, dibujando así salpicaduras en la pista.
La de Ontario ha combinado su glacial voz --micro en mano-- con una ajetreada labor sobre el piano, mientras en las entrañas del SónarComplex el compositor Robert Piotrowicz acariciaba sus sintetizadores para mostrarle a Barcelona su último trabajo, 'When Snakeboy Is Dying', ante un gran deambular de público.
La música clásica también ha tenido su espacio en esta edición del Sónar, con la experimental propuesta del 'multinstrumentista' australiano, Oren Ambarchi, junto a los 20 músicos que componen la Sinfonietta de Cracovia, dirigida por el compositor Eyvind Kang y con la presencia del batería Joe Talia, quienes se han puesto a rechinar 'Knots', la producción especial de Sónar junto al festival polaco Unsound.
FIESTA ISLANDESA
Desde Islandia, FM Belfast --con gran sofoco de Lóa Hjálmtsdóttir-- han hecho saltar al público más entregado hasta el momento, creando una verdadera fiesta en el recinto y logrando la diversión y comunión buscadas con su audiencia a base de un intenso directo, que ha obligado a los festivaleros a brincar sin parar durante una hora.
En las cavernas del SónarHall, los británicos Simian Mobile Disco han hecho el lleno con la presentación de su trabajo 'Whorl' a base de un solo sintetizador y ecualizador, acompañados de unos hipnotizantes audiovisuales; el espectáculo ha muerto de éxito a juzgar por el colapso de la sala.
Los latinos Dengue Dengue Dengue han tomado el relevo algo antes de tiempo con su show de máscaras peruanas, a ritmo de mash-ups de cumbia mezclados con dubstep y minimal techno, apoyados también en unas étnicas videoproyecciones para el disfrute y agitación de sus fans, y llenándose hasta los confines.
Los sonidos de cortocircuito erizado han llegado de la mano del libanés Tarek Atoui atizados por sus manos planeadoras --como si de un mago se tratara-- sobre la mesa invadida por los instrumentos creados por él mismo.
Simon Green --Bonobo-- ha puesto el broche a la jornada con la presentación abarrotada de 'The north borders' a falta de las actuaciones en la edición diurna de Buraka Som Sistema y Oneohtrix, y encarrilando el festival hacia las esperadas actuaciones nocturnas de Röyksopp & Robyn, Caribou, Woodkid y Dowliners Sekt.
