JARC asegura que el plan de la Generalitat no se apoya en un modelo de fruticultura con fruticultores
LLEIDA, 2 May. (EUROPA PRESS) -
La Conselleria de Agricultura ha enviado al Ministerio de Agricultura el Plan de Acción de la Fruta Dulce elaborado con aportaciones de 70 personas del sector que contempla la petición a la ministra Isabel García Tejerina, que negocie retirar del mercado en junio 80.000 toneladas de fruta de hueso, como melocotón y nectarina, si los precios vuelven a hundirse como en las últimas campañas, y en caso de que no sea posible que negocie un plan de arranque de 2.000 hectáreas de frutales unido a un plan de reconversión.
El director general de Alimentación, Calidad e Industrias Agroalimentarias del Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, Carmel Mòdol, ha presentado este miércoles en rueda de prensa el Plan de Acción de la Fruta Dulce que plantea una inversión de 19,5 millones de las que seis millones corresponderían a la Generalitat, 4,5 al Estado y el resto a la Unión Europea.
El plan, planteado para hacerlo realidad en dos años, contempla 10 medidas y 32 acciones específicas y gira en torno a un plan de arranques, uno de reconversión, fomento del consumo, mejora de las exportaciones e inspecciones.
El fomento del consumo incluye un plan de comunicación, campañas 012, impulso de la venta de proximidad, actuaciones de promoción conjuntas con el Departamento de Salud, mayor presencia en restauración y programas de mejora de la calidad.
"Catalunya es una especie de gigante frutícola, pero un gigante con pies de barro, y queremos que tenga unos pies sólidos, fuertes, y que le permitan correr y ganar el futuro, por eso hay que reforzar la estructura productiva, el comercio, la internacionalización y la innovación", ha afirmado Mòdol.
Tras la presentación del plan a los medios, la primera valoración ha llegado de Joves Agricutorsi Ramaders de Catalunya (JARC), organización que a través de un comunicado ha asegurado que el documento no se apoya en un modelo de fruticultura con fruticultores.
JARC no ve con buenos ojos que hace unos años se destinara presupuesto a nuevas plantaciones y ahora se plantee una reconversión varietal y argumenta que "es una muestra del desorden que impera en los círculos de decisión, que sólo termina favoreciendo a los cuatro grandes".
