La escuela ngel Guimer de Balaguer pierde la línea de P3
LLEIDA, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los profesores del colegio Cervantes de Lleida, su director, Carles Lleixa, y la Asociación de Padres y Madres de Alumnos (AMPA) representada por su presidente, Óscar Hernández, han agradecido este jueves a la ciudad el apoyo que han recibido para mantener la línea de P3 en la escuela el próximo curso, lo que evitará el cierre progresivo que inicialmente había previsto la Conselleria de Educación.
La concentración inicialmente prevista en la puerta del centro en la calle Cavallers, en el centro histórico, se ha convertido en una pequeña degustación en la que el director ha dicho que están muy contentos por el apoyo que han recibido a la continuidad del centro.
Además del edificio de la calle Cavallers, que acoge a estudiantes de los cursos más altos, el colegio tiene otro espacio para los niños más pequeños en la calle Sant Andreu.
"Queremos dar las gracias a toda la ciudad de Lleida, a maestros, a exmaestros, a sindicatos, a padres, a madres, a la prensa, a las asociaciones de vecinos del barrio, no nos lo esperábamos", ha afirmado Lleixa.
El presidente del AMPA ha dicho que las familias están contentas y ha centrado su agradecimiento en el alcalde de la ciudad, el republicano Miquel Pueyo, que el miércoles afirmó en un vídeo que en la ciudad no se cerraría ningún centro educativo "sin el visto bueno del gobierno municipal y sin la voluntad expresa de su alcalde".
"Estamos muy agradecidos al alcalde de Lleida, Miquel Pueyo, hemos visto que ha extendido su mano hacia nosotros, nos ha ayudado mucho" ha afirmado Hernández.
Junto al anuncio del cierre progresivo la semana pasada de la escuela Cervantes, con la eliminación de la línea de P3, argumentando que era una medida contra la segregación escolar, la Conselleria de Educació alertó también de la supresión de la misma línea de la escuela ngel Guimer de Balaguer (Lleida), que ya tiene el visto bueno de la comunidad educativa y del Ayuntamiento de la ciudad.
La junta de personal docente de Lleida ha asegurado en un comunicado este jueves que "el anuncio del cierre progresivo de la Escuela Cervantes de Lleida y de la Escuela ngel Guimer de Balaguer fue una mala noticia para la educación pública, sus claustros y comunidades educativas".
La junta de personal insiste en que cerrar un centro no es la solución y exige que se priorice pensar si la escuela Cervantes "ha de continuar donde está, en un edificio que no reúne las mínimas condiciones" o bien, recogiendo una propuesta del propio claustro, trasladar todos los niveles al edificio de los mayores, que necesitaría una ampliación.
