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BARCELONA, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB) ha vendido del edificio con la sede del Banco de Sangre y de Tejidos a Recober Inversiones por 38,2 millones de euros.
El edificio que alberga el BST está situado en el número 7 de la calle Lope de Vega de Barcelona; consta de cinco plantas sobre rasante, planta baja y sótano, y que es el primer activo de la cartera inmobiliaria del Consorcio que se vende en los últimos años.
La venta se ha producido en la segunda ocasión que el edificio sale a subasta, ya que en noviembre del 2012 quedó desierta la primera, con un precio de salida de 45 millones de euros.
El BST, dedicado al tratamiento de hemoderivados, ocupa este edificio de 16.000 metros cuadrados desde 2010, cuando el Consorcio lo promovió de acuerdo con CatSalut y el Ayuntamiento de Barcelona para que dispusiera de una sede corporativa.
El actual contrato de arrendamiento a 50 años se mantiene "con las mismas condiciones", por lo que esta transacción no afectará a la actividad propia del BST ni su continuidad en el edificio.
El Consorcio pretende sacar a subasta pública varios edificios más, entre ellos la Torre Telefónica, y dedicar parte de estos recursos a proyectos de reactivación económica, a través de la reinversión en el polígono industrial de la Zona Franca, acciones de internacionalización de las empresas, promoción de centros comerciales y la promoción de vivienda a "precios asequibles".
DINAMIZACIÓN DE LA ECONOMÍA
En los próximos meses el Consorcio pondrá en el mercado inmobiliario sus participaciones en desarrollos urbanísticos como La Marina del Prat Vermell y los antiguos cuarteles de Sant Andreu en Barcelona, así como la City Metropolitana de Mollet, y estudiará la promoción de suelo comercial y de vivienda en colaboración con inversores privados.
En el caso de La Marina, un nuevo barrio en el distrito de Sants-Montjuïc de dimensión equivalente a 40 manzanas del Eixample, se prevé el desarrollo de unas 10.000 viviendas, un 38% de ellas de régimen libre y un 35% de protección: en esta área, el ente cuenta con 100.000 metros cuadrados de techo para uso residencial y 46.000 metros cuadrados para actividades económicas.
En el caso del barrio de los cuarteles de Sant Andreu, el desarrollo que ya cuenta con algunos edificios construidos, la planificación urbanística prevé la construcción de 2.000 viviendas, de las que unas 1.200, un 60%, serán de protección o dotación pública.
El Consorcio ha ajustado gasto un 20% en los dos últimos años, ha reducido su deuda financiera --cercana a 200 millones de euros-, ha reactivado la comercialización del suelo industrial de la Zona Franca y ha acometido la primera venta de activos ajenos al polígono industrial, como es el caso del edificio que ahora se ha vendido.
La crisis inmobiliaria obligó a la entidad a reajustar el precio de sus activos por unos 40 millones de euros, y tras dos años de pérdidas, la entidad ha vuelto a los beneficios en 2013.
Esta entidad pública, que tiene al Gobierno central y al Ayuntamiento de Barcelona en sus órganos de gobierno, se ha marcado la línea estratégica de apoyar la internacionalización de las pymes a través de acciones de intermediación y comercio internacional y promoviendo eventos feriales.
