BARCELONA, 15 Ago. (EUROPA PRESS) -
La 42 edición de la Universitat Catalana d'Estiu (UCE) dará este lunes en Prada de Conflent (Francia) el pistoletazo de salida a nueve días de conferencias, debates, talleres, cursos y espectáculos que este año estarán marcados por la proximidad de las elecciones catalanas y la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut.
Prueba de ello es que una da las actividades centrales de esta edición es la mesa redonda que el miércoles 18 reunirá a representantes de ERC, ICV, CiU y PSC para abordar la sentencia del TC y explicar sus propuestas de futuro.
Expondrán sus proyectos el líder de ERC y candidato a la presidencia de la Generalitat, Joan Puigcercós, el presidente del grupo parlamentario de ICV-EUiA, Jaume Bosch, la secretaria del Govern, Laia Bonet, --que presumiblemente será la número dos del PSC en los próximos comicios-- y el diputado de CiU en el Parlament Antoni Castellà.
El conseller de Innovación, Universidades y Empresa, Josep Huguet, será el encargado de abrir la UCE con una lección inaugural sobre historia y poesía, mientras que el conseller de Política Territorial y Obras Públicas, Joaquim Nadal, participará en un acto sobre el Corredor Mediterráneo.
También acudirán a Prada de Conflent la consellera de Salud, Marina Geli, la consellera de Justicia, Montserrat Tura, la consellera de Acción Social y Ciudadanía, Carme Capdevila,y el ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol.
La clausura de las jornadas irá a cargo del ex presidente de la Generalitat Pasqual Maragall, que participará en un acto en conmemoración del pintor y militante nacionalista Manuel Viusà. La UCE homenajeará también a Pompeu Fabra, Jaume Vicens Vives y Màrius Torres.
También se celebrarán conferencias sobre cuestiones de actualidad, como las consultas independentistas, la ley del cine, las selecciones deportivas catalanas y el sincrotrón Alba, inaugurado este mes de marzo en Cerdanyola del Vallès (Barcelona).
La Universidad Catalana d'Estiu nació en 1968 para promover la lengua y la cultura catalanas en el Rosellón (Francia), y para crear un punto de encuentro durante el franquismo de personas de Catalunya, las Baleares y la Comunidad Valenciana.
