BARCELONA, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -
El viceprimer secretario y portavoz del PSC, Miquel Iceta, consideró hoy que si la consulta soberanista de Arenys de Munt (Barcelona) del 13 de septiembre la promueve exclusivamente una entidad privada, puede hacerse.
"Si es de una organización privada, en el sentido de que no es de ninguna administración pública, pueden hacer lo que quieran", sostuvo Iceta, en declaraciones a la emisora Rac1 recogidas por Europa Press.
Otra cosa bien distinta es si en la consulta hay colaboración por parte del Ayuntamiento de la localidad. "Si el Ayuntamiento presta colaboración, hay que ver cuál es", y esto es lo que a su juicio, es lo que motiva el recurso presentado por la Abogacía del Estado contra la consulta.
Para Iceta, "puede haber un problema" ante una consulta en la que el consistorio, como administración pública, preste algún tipo de colaboración.
En este sentido, recordó que según la legislación vigente, los Ayuntamientos pueden convocar consultas pero "sólo en temas de su competencia y debidamente autorizados". En el caso de Arenys de Munt, explicó, el consistorio colabora con los promotores privados de la consulta, cediéndoles el lugar en el que se ubicará la urna para la consulta.
Iceta recordó que la celebración de consultas en Catalunya no es algo nuevo, y recordó que en las elecciones generales de 2000, hubo una en la que se preguntó a los ciudadanos si estaban de acuerdo en la abolición por parte de la deuda que mantienen los paises del tercer mundo con el Estado español.
Sobre el Estatut, Iceta insistió en la entrevista de que su partido, el PSC, no va a entrar en el debate sobre un eventual recorte del Estatut por parte del Tribunal Constitucional (TC), primeramente porque los socialistas catalanes están absolutamente convencidos de la "constitucionalidad" de la norma.
Consideró que este verano ha habido en Catalunya un "espectáculo grotesco", ante las declaraciones y contradeclaraciones de la clase política catalana sobre la conveniencia o no de celebrar una manifestación preventiva para defender la constitucionalidad del Estatut.
Iceta recordó que, para él, un recorte no sería una "buena noticia".
