Le preguntó si conocía a un sicario y si se puede descubrir la causa de la muerte de un cuerpo calcinado
BARCELONA, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -
Una interna de la prisión de mujeres Wad-Ras ha declarado este jueves en el juicio por el crimen de la Guardia Urbana que la coacusada Rosa Peral le explicó que la noche del crimen dio a la víctima, Pedro R., un medicamento que su exmarido tomaba para la ciática "para que se calmara".
La testigo, que compartió centro penitenciario con la acusada, ha relatado ante el Tribunal del Jurado que Peral le contó que suministró a su pareja, Pedro R., el agua para tomar la medicación.
Se sospecha que antes del asesinato, la noche del 1 mayo de 2017, Pedro R. pudo ser sedado o drogado, y después de matarle, el autor o autores del crimen le quemaron dentro de su coche.
Posteriormente, la abogada de Peral, Olga Arderiu, ha preguntado a la testigo por qué no dijo nada sobre el medicamento en su primera declaración y ha pedido que se estime como una contradicción, lo que decidirá el presidente de la sala, Enrique Rovira.
"TENÍA GANAS DE MATAR" A SU EXMARIDO
La interna de Wad-Ras también ha explicado que Peral le dijo en muchas ocasiones que "tenía ganas de matar a Rubén", su exmarido, y que la acusada le preguntó si conocía a un sicario que pudiera asesinarlo.
"Se estaba hablando de quitarle la vida a un mosso d'Esquadra. Era algo muy grande", ha dicho en relación al exmarido de Peral, que es agente del cuerpo de policía catalana.
Además, la testigo ha explicado que, como ella tenía acceso a Internet desde la prisión porque estudiaba a distancia, Peral le pidió buscar "si a un cadáver calcinado se le podía averiguar la causa de la muerte".