Piden 50 años por la muerte de un guardia civil que perseguía a unos atracadores en Salou (Tarragona)

Actualizado: sábado, 21 febrero 2009 12:56

TARRAGONA, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Sección Cuarta de la Audiencia de Tarragona acoge durante esta semana el juicio contra Alfredo L.F., acusado de matar a un guardia civil que intentaba evitar el secuestro de un matrimonio de joyeros el 1 de marzo de 2007 en Salou (Tarragona). La Fiscalía pide que se le condene a 50 años y medio por la muerte del agente y otros siete delitos.

La víctima, Juan Manuel M. R., de 36 años, fue tiroteada cuando, junto con otro agente, trataba impedir la huída de los presuntos secuestradores por el ático del edificio Fidias. La Guardia Civil le concedió, a título póstumo, la Cruz del Orden del Mérito del Cuerpo con distintivo rojo.

En concreto, la Fiscalía pide que se condene a Alfredo L.F. a 14 años de prisión por homicidio, a 15 más por dos tentativas de homicidio, a 12 años por dos delitos de detención ilegal y a tres años y medio de cárcel por robo, la misma pena que solicita por el atentado a la autoridad. También pide que se le condene a dos años y medio más por tenencia ilícita de armas, y a indemnizar con 120.000 euros a la viuda y con 60.000 euros a cada una de las dos hijas.

En el banquillo de los acusados, también se sentarán otras dos personas: el otro presunto atracador, Jean Carlos U.P., que se enfrenta a una pena de 19 años de prisión por los delitos de robo, detención ilegal y atentado a la autoridad, y la mujer que les esperaba en un coche para huir, para la que el Ministerio Público pide dos años y medio de cárcel como cómplice.

Los hechos ocurrieron sobre las 20 horas del 1 de marzo de 2007, cuando el matrimonio cerró su joyería e iba hacia su domicilio, situado cerca del establecimiento. Fue entonces cuando les asaltaron dos encapuchados, que les encerraron en un cuarto de limpieza cercano al garaje y les amenazaron con un cuchillo y una pistola. En un despiste, el matrimonio logró huir.

El hombre salió a pedir auxilio y se encontró con agentes de la Guardia Civil en un café cercano que iniciaron una persecución por el edificio. La víctima y uno de sus compañeros acorralaron a los delincuentes en el ático y se produjo un forcejeo durante el cual el agente resultó herido mortalmente y Alfredo L.F., de gravedad.