TARRAGONA, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Puerto de Tarragona invertirá unos 40 millones de euros anuales en los próximos cinco años en infraestructuras con el objetivo de estar en plenas condiciones de competitividad para cuando termine la crisis, según explicó hoy el presidente de la Autoridad Portuaria de Tarragona, Josep Anton Burgasé, en la presentación de la memoria anual 2007 del ente.
Las grandes inversiones previstas para el 2009 son las obras de la segunda fase de la terminal de contenedores DP World Tarragona, con un presupuesto total de unos 67 millones de euros, y la realización de una conexión ferroviaria paralela a la que existe actualmente para vehículos mediante un puente móvil, con un coste previsto de unos 10 millones de euros.
Con un coste similar se construirá una vía férrea y de transporte terrestre para unir la zona logística con el Muelle; además, se prevé habilitar una zona para cubrir lateralmente la descarga de carbón y así evitar que se desprendan partículas a la atmósfera.
A esto, cabe sumar la inversión privada, presupuestada en unos 150 millones de euros para la construcción del Muelle de las Illes Balears, cuyas obras empezarán el año que viene y durarán unos cuatro años.
"Se continuará invirtiendo en el 2009 en adaptar las instalaciones e infraestructuras para estar en perfecto estado de explotación para cuando la economía remonte", señaló Burgasé.
Según él, el crecimiento récord del 14% respecto el año anterior que se dio en el tráfico de mercancías del Puerto, con 36,2 millones de toneladas de movimiento en el 2007, "difícilmente se repetirá".
Señaló que en el 2008 las cifras que resultarán serán "similares a las del 2006", y además indicó que se ha notado una bajada sobre el volumen de toneladas transportadas. Así, se ha pasado del millón y medio de toneladas de clincker del 2007 a las 300.000 actuales, lo que influirá en el decrecimiento previsto de un 3% en los movimientos.
Los resultados definitivos no estarán hasta finales de año, y se está pendiente de la bajada que se pueda registrar por la actual crisis. El último trimestre de 2008 "no está siendo bueno en el conjunto de la actividad portuaria del Estado", remachó.
PÉRDIDAS POR LA RUPTURA DE LA MONOBOYA
La ruptura de la monoboya de la empresa Repsol afectó la entrada de crudos por el Puerto, donde se perdieron 900.000 toneladas, dado que el transporte de crudo Maya se tuvo que realizar por Cartagena.
"Aunque se haya importado fuel, no ha sido en estas cantidades", manifestó Burgasé. "Si no fuera por esta incidencia --remarcó-- los índices se situarían en un crecimiento similar al del 2007".
La monoboya fue dañada por un petrolero el 21 de octubre de 2007 y su reparación se alargó hasta julio de 2008, con un coste para Repsol de más de 20 millones de euros.
