Sucesos.- Los Mossos sabían desde el martes que el 'gourmet' desaparecido en El Bulli había sido localizado

Actualizado: viernes, 8 agosto 2008 1:04

GIRONA, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -

Los Mossos d'Esquadra sabían desde el martes por la tarde que el 'gourmet' suizo Pascal Henry desaparecido el 12 de junio del restaurante El Bulli de Ferran Adrià, en Roses (Girona), había sido localizado hacía semanas en buen estado de salud en Ginebra, según explicaron a Europa Press fuentes de la Policía catalana.

No obstante, el aviso no llegó a los investigadores hasta casi 48 horas más tarde, a las 13 horas de hoy, cuando ya había casi terminado la búsqueda sobre el terreno que realizaron una treintena de mossos.

Según las mismas fuentes, la información sobre el paradero de Henry llegó el martes por la tarde al enlace que los Mossos tienen en Madrid para coordinarse con la Interpol. La información no estaba considerada urgente, por lo que el funcionario la dejó en cola y no la envió a sus compañeros en Barcelona.

En los casos en los que la información se considera urgente, es la propia delegación de Interpol en Madrid quien llama por teléfono a los Mossos d'Esquadra en Barcelona para comunicar la incidencia de forma más rápida.

Al día siguiente, ayer miércoles, el agente de la Sala Central de los Mossos en Catalunya destinado a recoger y reenviar los avisos de la Interpol y otras policías recibidos en Madrid estaba "indispuesto", según las citadas fuentes. Lo que se desconoce es porqué nadie sustituyó a este funcionario durante el día de ayer.

Esta mañana, cuando el mosso volvió a su puesto de trabajo, reenvió el aviso a las unidades pertinentes, pero ya era demasiado tarde, sobre las 13 horas, y los equipos de rastreo en el terreno ya habían casi terminado su trabajo.

Ahora la Policía catalana pone fin a la búsqueda de Henry, ya que se encuentra fuera de Catalunya, hasta que la Interpol verifique definitivamente la localización y estado del gastrónomo.

Interpol detectó movimientos bancarios en las cuentas de Henry muy pocos días después de su extraña desaparición. Gracias a las imágenes de las cámaras de seguridad se pudo confirmar que era el mismo Henry quien retiraba dinero de cajeros automáticos de Ginebra y que no se trataba de ninguna otra persona que hubiera usurpado su identidad.