Un comité de expertos el salud evaluará la efectividad de la ZBE
BARCELONA, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
El concejal de Emergencia Climática de Barcelona, Eloi Badia, ha dicho que este miércoles el tráfico en la ciudad ha bajado un 2,4% en comparación a la media de un día laborable de noviembre entre las 7 y las 10 de la mañana, en el primer día laborable después de las vacaciones de Navidad con la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en vigor.
En una rueda de prensa junto a la concejal de Salud, Gemma Tarafa, Badia ha señalado que el tráfico ha bajado un 2,4% en el interior de la ciudad; un 0,8% en los accesos y un 1,8% en las rondas, aunque ha admitido que el volumen de vehículos es el mismo si se comparan las cifras con el 8 de enero de 2019, y que tampoco se ha notado un incremento de pasajeros significativo en la red de transporte público.
También ha reconocido que las cámaras instaladas ya han detectado a vehículos son distintivo de la Dirección General de Tráfico (DGT) que circulan a pesar de las restricción, pero ha afirmado que aún se está en fase informativa, y que se enviarán cartas a aquellos conductores que circulan de forma reiterada con un vehículo contaminante por el interior de la ZBE para explicarles la medida.
Badia reconoce que es "prematuro" sacar conclusiones sobre la efectividad de la ZBE porque hasta el 1 de abril no se empezará a multar a los usuarios de vehículos contaminantes que infrinjan las restricciones, y porque hay algunos vehículos que tienen una moratoria de un año, y ha dicho que hasta finales de enero el consistorio no tendrá datos sobre si han descendido los niveles de contaminación.
"Cuando acabe el mes de enero haremos una media del tráfico en los días laborables para hacer comparaciones durante los próximos meses. En esta media no tendremos en cuanta los viernes, porque la movilidad es distinta", ha expresado Badia, que ha celebrado el crecimiento de peticiones de la T-Verda, que proporciona transporte ilimitado gratuito a los que desguacen un vehículo contaminante.
EVALUACIÓN DE LA ZBE
Tarafa ha explicado que un comité de científicos y expertos en salud evaluará la efectividad de la ZBE: medirá la mejora de la calidad del aire y el impacto en la salud de las personas, y realizará informes monográficos cada seis meses y hará estudios "exhaustivos" para evaluar la ZBE a los 12 meses y a los 24 después de la entrada en vigor de la normativa.
El grupo estará formado por técnicos en calidad ambiental y salud del Ayuntamiento, la Generalitat y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB), así como científicos del Institut de Diagnstic Ambiental i Estudis de l'Aigua que forma parte del Consejo Superior de Investigaciones Científica (Idaea-Csic) y del Institut de Salut Global (ISGlobal).
La concejal ha recordado que la ciudad supera de forma continuada desde hace dos décadas los niveles de referencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en dióxido de nitrógeno (NO2) y de partículas en suspensión (PM10 y PM2,5), y que el 48% de los barceloneses están expuestos a niveles de NO2 superiores a los que recomienda la OMS y hasta el 95% en niveles de PM10.
"Lo que genera mortalidad y peor calidad de vida es la contaminación atmosférica continuada", ha subrayado Tarafa, que ha insistido en que hay literatura extensa y probada del impact
