Trànsit intentará que la educación vial sea asignatura obligatoria en las escuelas catalanas

Actualizado: lunes, 14 enero 2008 21:12

BARCELONA, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Servei Català de Trànsit (SCT) intentará que la educación vial forme parte de una asignatura obligatoria en las escuelas catalanas. De esta manera, no serían las escuelas las que escogerían si ofrecen o no esta materia, sinó la Conselleria de Educación quien obligaría a ello.

Según explicaron hoy el conseller de Interior, Joan Saura, y el director del SCT, Josep Pérez Moya, hay conversaciones con Educación para intentar introducir esta materia en los próximos cursos. La intención es que se dé esta asignatura en los cursos de Primaria y ESO.

Esta propuesta es una de las 57 medidas que el SCT impulsa en el Plan de Seguridad Vial 2008-2010, presentado y aprobado hoy por la Comisión Catalana de Tráfico y Seguridad Vial, y que tiene como uno de sus principales objetivos reducir a la mitad los fallecidos en las carreteras respecto al año 2000. Trànsit quiere imitar así la experiencia de más de 20 años de países como Gran Bretaña, Holanda o Suecia, con mejores tasas de siniestralidad.

Otra de las medidas destacables, agrupadas en tres grandes líneas de actuación y 11 ejes básicos, son la instalación de 105 radares fijos, 35 cada año.

Una de las líneas de actuación es la lucha contra la velocidad excesiva y el alcohol y la promoción de los elementos de seguridad pasiva. Uno de los ejemplos es la realización de una prueba piloto para controlar la velocidad por tramos de carretera y calcular la velocidad media. Se iniciará en túneles, empezando por el de Vielha (Lleida).

Los Mossos d'Esquadra y las Policías Locales tendrán que mejorar la "calidad" de los controles de alcoholemia, concentrándolos en lugares y horarios de riesgo. También aumentarán el número de etilómetros y aparatos detectores de drogas.

Para reducir los accidentes, Trànsit también intentará mejorar la gestión del tráfico y la movilidad, así como reducir el número de vehículos que circulan. Algunas medidas para conseguirlo consistirán en la instalación de carriles bus o bus-VAO en los principales accesos a Barcelona o la regulación variable de la velocidad.

Por último, se realizarán varios estudios técnicos para conocer las causas de la accidentalidad, especialmente de las motocicletas, que en los últimos meses han aumentado.

MEJORAR LA ACCIDENTALIDAD URBANA.

Hasta ahora Trànsit ha firmado convenios con 36 ayuntamientos --que representan el 44% de la población catalana-- para elaborar planes locales de seguridad, pero espera que en los próximos tres años lo haga con 44 municipios más, incluyendo todas las capitales de comarca y las localidades de más de 30.000 habitantes, lo que supondría alcanzar al 70% de la población catalana.

Los responsables del SCT están preocupados por la leve disminución de la accidentalidad en vías urbanas. Mientras que desde el año 2000 al 2006 los muertos en carreteras bajaron un 42,5%, en vías urbanas sólo lo hizo un 15,6%. Para estudiar este fenómeno, en el segundo semestre de este año se celebrarán unas jornadas de seguridad vial en el ámbito urbano.