La universitaria de Alpicat (Lleida) murió asfixiada por alguien que le tapó las fosas nasales

Actualizado: jueves, 19 octubre 2006 20:26

LLEIDA, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -

La joven universitaria de Alpicat (Lleida) Maria Isabel Bascuñana murió asfixiada por alguien que le tapó las fosas nasales y la boca y después la estranguló, según los médicos forenses que examinaron el cadáver de la chica aparecida el 24 de noviembre del 2004 en el maletero de su propio turismo aparcado en un barrio de Lleida.

En el juicio que empezó hoy, también declararon los mossos d'Esquadra que encontraron el cadáver, quienes aseguraron que estaba en el maletero del Nissan Sunny de la chica cubierto por bolsas de basura negras. Los agentes también señalaron que la chica iba vestida de forma normal aunque les llamó la atención la manera de llevar atados los zapatos y que tuviera un trapo en el cuello.

Después de salir de clase, la joven llamó a su madre cinco minutos antes de las 22 horas y le dijo que compraría un bocadillo, cogería el coche y volvería a casa. Entre las 22.15 y 22.30 horas se la vio en dos establecimientos de la llamada Illa de l'Oci, una zona con bares y cines próxima al campus universitario de Lleida. A partir de ahí se le pierde la pista y a la medianoche ya no contestaba al teléfono móvil.

Los mossos explicaron que durante la investigación no encontraron a nadie que hubiera visto al acusado durante ese periodo de tiempo y que cuando faltaban diez minutos para la medianoche, la encargada del cine recordaba haberlo visto en el párking. Los mossos también explicaron que en las bolsas que envolvían el cadáver se encontraron 11 huellas dactilares y que cuatro eran suficientemente nítidas para ser identificadas. Estas cuatro corresponden al acusado.

SU OTRA VÍCTIMA TAMBIÉN LE IDENTIFICA.

Este jueves también declaró la joven rumana que el verano de 2003 ejercía la prostitución en la antigua carretera N-II en Lleida y a la que supuestamente también intentó violar y matar el acusado. A la chica la buscaron los Mossos después de que el mismo Chamba dijera que había tenido problemas con una prostituta al ser detenido por el caso de Bascuñana. La mujer lo reconoció por la fotografía y en la rueda de reconocimiento, y aseguró, "sin ninguna duda", que él fue quien la intentó matar.

La joven explicó que aquella noche, Chamba contrató sus servicios y cuando estaban dentro del coche en el campo, como no conseguía una erección, comenzó a ahogarla presionándole el cuello con el dedo gordo hasta que tuvo verdaderos problemas para respirar. Ella le cogió de los testículos con una mano y con la otra consiguió abrir la puerta del coche e irse con la ayuda de su hermanastra, que fue a ayudarla. En ese momento no lo denunció, aseguró, porque estaba en situación irregular.