MONTCADA I REIXAC (BARCELONA), 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los vecinos de Montcada i Reixac han asegurado que endurecerán el tono de sus protestas y volverán a emprender acciones más radicales como cortar las vías o la C-17 a su paso por la ciudad para lograr que el Ministerio de Fomento asuma su compromiso de soterrar la R2 en el municipio.
Lo ha explicado el portavoz de la Plataforma Soterrament Total, Ramón Bueno, que ha criticado que el proyecto acordado haya vuelto a quedar fuera de los Presupuestos Generales del Estado de 2015.
"Esta es una obra vital para Montcada porque nuestra ciudad ha sido castigada durante muchos años y necesitamos volverla a coser", ha explicado Bueno, que ha recordado que por la localidad pasan tres líneas de cercanías, además del AVE, la C-33, la C-17 y la N-150.
En este sentido ha remarcado que la R2 parte el corazón de la ciudad en dos y dificulta el día a día de los ciudadanos: "Es imposible poder desarrollar una vida normal", afirma el portavoz del colectivo, que subraya que los habitantes se ven obligados a cruzar los pasos a nivel varias veces a lo largo de la jornada para acceder a servicios básicos como el CAP.
Bueno ha recordado que en 2007 el Ayuntamiento, la Generalitat, la Plataforma y Adif firmaron un convenio que establecía que esta línea de cercanías se soterraría coincidiendo con el desarrollo de las obras del AVE en el municipio, que prácticamente están terminadas.
Estas críticas coinciden con una visita que diputados del Parlament y el Congreso llevarán a cabo este lunes en la ciudad y en la que el consistorio y los miembros de la Plataforma les transmitirán la importancia de ejecutar esta obra.
"Queremos que vean en primera persona que Montcada es una ciudad especial con unas necesidades especiales y que esto sirva para que presenten alegaciones a los Presupuestos en esta dirección", apunta Bueno.
300 MILLONES DE INVERSIÓN
Los responsables municipales aseguran que el estallido de la crisis económica, el cambio de gobierno y el coste de soterrar esta vía, que está cifrado en 300 millones de euros, han sido los responsables de que este convenio no se haya ejecutado.
"Llegamos a un acuerdo para que el proyecto se llevara a cabo en cinco fases distintas, se presentaron estos cinco proyectos pero aún estamos esperando que asignen una partida para que alguno pueda empezarse", apuntan.
Por su parte, fuentes de Adif han explicado que uno de los puntos del convenio establecía que este proyecto se financiase a través de las plusvalías urbanísticas que se obtuvieran de recuperar terreno urbanizable una vez se soterrase la vía, un aspecto que por ahora no es viable.
Por su parte, el secretario general de Infraestructuras, Manuel Niño, se reunió el pasado 30 de septiembre con representantes del Ayuntamiento vallesano y les comunicó que por ahora el soterramiento no es una prioridad para el gobierno español.
