MELILLA, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
El consejero delegado de Air Nostrum, Carlos Bertoumeu, ha anunciado en Melilla que desde este mes la compañía aérea Air Nostrum operará con los cinco aviones nuevos, los ATR 72-600 que sustituyen a los ATR 72-500, convirtiendo a localidad española del Norte de África "en la ciudad europea con la flota de turbohélices más moderna".
En rueda de prensa, Bertomeu ha asegurado que la empresa que enlaza Melilla con Málaga, Almería, Granada y Madrid ya tiene desde octubre en funcionamiento "los cinco nuevos aviones, en los que la compañía ha invertido 300 millones de euros, convirtiéndonos en la ciudad europea con la flota de turbohélices más moderna, con una edad media de tres meses".
Acompañado por el viceconsejero de Turismo, Javier Mateo (PP), Bertoume ha indicado que no sólo los melillenses están acogiendo bien estos aviones, sino que también lo están haciendo los foráneos: "el turismo está dando sus frutos" ha resaltado.
El consejero delegado ha destacado las ventajas del nuevo aparato, "entre las que está el aumento de plazas, que ni van ni vienen vacías", según Carlos Bertomeu.
Así ha asegurado que las rutas vacacionales han obtenido una buena respuesta, "moviendo sólo en agosto a 1.981 pasajeros, un 48 por ciento más que en 2011". De igual modo ha indicado que "por primera vez, en lo que va de año, la demanda se estabiliza e incluso crece ligeramente con respecto al año pasado, lo que para Air Nostrum demuestra una buena acogida de los melillenses al cambio de flota realizado por la compañía".
Carlos Bertoumeu ha explicado que el ATR 72-600 permite el sistema de aproximación vía satélite, al pasar la aviónica de los turbohélices de analógica a digital y esto podría posibilitar que hubiera vuelos nocturnos o, al menos, aumentar la operatividad actual del aeródromo melillense.
De este modo ha manifestado que esta posibilidad "es algo que nos encanta como operadores, porque si se amplía el horario del aeropuerto, podemos hacer una distribución de horarios más adecuada a la demanda y una mayor utilización del avión", puesto que "siempre es penalizante en este y en otro aeropuerto que haya un horario restringido".
No obstante ha admitido que es consciente del mal momento económico, pues, "un aeropuerto que se abra más horas, necesita controladores, guardas, seguridad" y una plantilla pendiente de ello.
