LOS ANGELES, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
Si la magnífica interpretación de Give Me All Your Luvin' en la final de la Super Bowl hace casi un mes estuvo en boca de todos durante semanas, en estos momentos, la canción Girl Gone Wild le está provocando a Madonna más de un dolor de cabeza y alguna que otra enemistad.
Al parecer, Joe Francis, el fundador de Girls Gone Wild, una franquicia dedicada a la creación y distribución de vídeos de contenido pornográfico, seguiría estando en pie de guerra contra la ambición rubia llegando incluso a amenazarla con emprender duras acciones legales contra ella.
Según la web NME, el conocido empresario californiano amenazó con demandar a Madonna por una supuesta infracción a nivel de marca y sigue afirmando haber enviado a la cantante una carta en la que la instaba a no interpretar Girl Gone Wild en el intermedio de la final de fútbol americano.
Joe Francis se negaba a que la material girl utilizase el nombre de su empresa como título para su nueva canción. Por esta razón, se rumoreó que la canción, que en un principio iba a titularse Girls Gone Wild (en plural), finalmente se haya publicado bajo el título Girl Gone Wild (en singular).
Sin embargo, el manager de Madonna, Guy Oseary, ha asegurado a TMZ que nadie de su equipo recibió una carta de Francis y que Madonna no está al tanto de la situación. Además, la decisión de eliminar la s de girl no ha sido por la presión ejercida por Francis sino una simple cuestión de pronunciación por parte de la cantante.
"Evidentemente, su sello discográfico está intentando evitar acciones legales en todo lo que a la canción se refiere. Girl Gone Wild sigue infringiendo la ley por lo que he estado en contacto con el equipo de Madonna para intentar resolver el problema", afirmaba Francis en la web estadounidense TMZ.
Girl Gone Wild es el segundo sencillo extraído del último álbum de MadonnaMDNA. En la provocativa portada podemos ver a la incombustible reina del pop en perfecta forma física luciendo una espléndida melena rubia y vistiendo un escueto y estudiado sujetador como ya lo hiciese hace casi 20 años en los tiempos de Like a virgin.
Independientemente de los problemas surgidos, está claro que Madonna seguirá dando de qué hablar durante mucho tiempo.
