Eugenia Silva: "No me haría especial ilusión que Alfonso me pidiera matrimonio, estamos muy bien ahora"

Eugenia Silva radiante y sin planes de boda
Foto: EUROPA PRESS 

MADRID, 25 May. (CHANCE-Irene Díaz) -    

   Radiante en su reaparición tras haber sido madre por primera vez, Eugenia Silva ha vuelto al trabajo para presentar ante los medios la nueva bebida Beauty And Go. Le ha costado separarse del pequeño pero quiere sentirse activa y aunque bajará su ritmo de trabajo no va a dejar la moda. El pequeño Alfonso ha venido a completar su relación con Alfonso de Borbón. Cuatro años después de su ruptura, la modelo y el hijo del primo del rey decidieron darse una segunda oportunidad, ahora se han convertido en padres. Un gran cambio de vida al que se están adapatando poco a poco y que ha llenado de felicidad a la pareja.

-Luces una figura escultural tras el embarazo, ¿cuál es tu secreto?
-Pues la verdad es que no he hecho absolutamente nada mas que darle de comer al enano, como igual que antes pero toda la energía la tengo puesta en el bebé. Me he organizado muy bien, duermo bien y no me he resentido en ese sentido. Bebidas como estas te facilitan mucho las cosas.

-¿Le estás dando el pecho?
-Sí, he tomado esa decisión pero no soy histérica ni radical en ese sentido, cada mujer se organiza como quiere, hay muchas que no pueden hacerlo.

-¿Cómo es el pequeño Alfonso?
-Muy bueno, ha nacido muy sano y es adorable.

-¿Cuentas con ayuda?
-Sí, tengo ayuda por las noches.

-¿El papá te ayuda con el bebé?
-Sí, pero ahora mismo es un momento más maternal, Alfonso y yo estamos ahora mismo intentando adatparnos esta nueva personita que ha llegado a nuestras vidas.

-¿Cómo te ha cambiado la maternidad?
-Mi vida está completamente al revés pero estoy feliz. El primer día de trabajo fuera de casa me ha estresado bastante pero estoy muy contenta y muy feliz.

-¿Vas a bajar el ritmo para centrarte en el pequeño?
-Me he hecho más exigente en ese sentido, voy a escoger proyectos que se adapten a mi momento vital, que sean fáciles y no me lleven mucho tiempo. Quiero tomármelo con calma pero me gusta sentirme activa. Con la lactancia es complicada la separación pero me voy adaptando.

-No vas a dejar la moda, ¿no?
-No, me dejaré llevar por lo que vaya viniendo, no tengo un plan. Voy a seguir como hasta ahora, trabajando para las marcas que me sigan reclamando, preparando mis editoriales de moda y con nuestra productora de cine en Nueva York cuando vuelva allí en septiembre.

-¿Has recibido muchas felicitaciones?
-Muchísimas, me ha hecho muchísima ilusión todo el cariño que he recibido. Es un logro personal y hace muchísima ilsuión ver que la gente te tiene cariño y te lo demuestra.

-¿Cómo ha afrontado Alfonso la paternidad?
-Muy bien, está muy contento, adaptándose como yo.

-¿Te esperabas que fuera un padrazo?
-Es inevitable, lo lleves o no dentro, te sale.

-¿Qué es lo más difícil de la maternidad?
-Por ahora no le he encontrado ningún "pero".


-¿Ni siquiera al hecho de no dormir?
-No, lo hago encantada, antes cada vez que tenía que estar en el aeropuerto a las cinco de la mañana despotricaba, ahora lo hago todo con una sonrisa.

-¿Te gustaría que te pidiera matrimonio?
-No, no me hace especial ilusión, la verdad.

-Hay quien cree que es el sueño de toda mujer, ¿tu no te ves casada?
-No, igual es que no soy igual que todas las mujeres, Alfonso y yo estamos muy bien como estamos.

-Has querido compartir con la gente el nacimiento de tu primer hijo y no esconderlo, ¿por qué has tomado esa decisión?
-Es una opción personal, tan respetable como quien elige la contrario. Yo quiero que crezca como un niño normal, con naturalidad, sin ocultarle. Me gusta enseñarlo porque es monísimo y además creo que haciéndolo así se acaba cla búsqueda y persecución que a mi me agobia bastante.

-¿Qué se siente teniendo un borbón entre los brazos?
-Tengo dos, no sólo uno.

-Creo que fue un parto complicado...
-Sí, fue complicado prefiero no entrar en detalles pero merece la pena.

-¿Te gustaría repetir?
-Ya se verá, no lo sé, ahora mismo estoy disfrutando de lo que tengo y ni me lo planteo.