MADRID, 17 May. (CHANCE) -
Para los fans de Rocío Jurado existe un día muy especial, instaurado desde que la de Chipiona falleciera en 2006: su Día Internacional. Este año volvía a celebrarse en la localidad gaditana esa jornada dedicada a la intérprete de canciones como 'Muera el amor'.
En esta ocasión no ha podido acudir su viudo, un Ortega Cano que se encuentra en la prisión de Zuera, desde que el 13 de abril finalizase el plazo dado por la juez para su ingreso voluntario, el que le lleva a cumplir una condena de dos años y medio de cárcel por el accidente de tráfico que le costó la vida a Carlos Parra. Amador Mohedano, que también era presencia habitual, se encuentra concursando en Supervivientes, por lo que ha sido el otro gran ausente.
Este año, sus 'embajadores' han sido dos: sus hijos Gloria Camila y José Fernando. Este último fue expulsado la pasada semana del Instituto Galeno de Sevilla, veinte días después de que iniciase el tratamiento. La razón al parecer pasaría por haber incumplido las pautas del lugar. Esa misma expulsión es la que le ha permitido reaparecer en el homenaje que se le daba a su madre y en el que no faltó absolutamente nada.
A las 12 de la mañana, en la plaza Pío XII de Chipiona, comenzaba un espectáculo en el que actuaron artistas como Antonio Santa Cruz o Raquel Zapico. Después se celebró una comida en el Hotel Chipiona, donde Gloria Camila recogió un cuadro que le entregó la asociación cultural 'R. J. La más grande', como socia de honor de la misma.
Finalmente tuvo lugar una misa en el cementerio de San José, frente al mausoleo de Rocío Jurado. Sus dos hijos estaban allí presentes junto a su tía, Gloria Mohedano Jurado, y su marido José Antonio Rodríguez. Se vivieron momentos muy emotivos, como cuando José Fernando depositó un ramo de flores sobre la tumba de su madre, o tanto él como su hermana, recibieron la eucaristía.
