La última superproducción sobre la figura bíblica de Moisés, Exodus, es censurada en Egipto y Marruecos. Sus gobiernos han prohibido la proyección de la obra de Ridley Scott poco antes de su estreno. El Ministerio de cultura egipicio la tacha de falacia historica y religiosa por que Moisés se presenta como un general y no como un profeta, como reza el islam.