MADRID, 11 May. (EUROPA PRESS) -
Astrónomos han encontrado un posible agujero negro supermasivo que está retrocediendo de una galaxia distante a alta velocidad. El agujero negro, visible con rayos X como una estrella clara, no se encuentra en el centro de la galaxia, como es habitual.
Los agujeros negros en retroceso son interesantes porque permiten conocer cómo se desarrolla un agujero negro supermasivo en el centro de las galaxias. La estudiante de la Universidad de Utrecht Marianne Heida descubrió la estrella durante su proyecto final de grado, realizado en Instituto Holandés para la Investigación Espacial SRON, en una galaxia a más de quinientos millones de años luz de distancia.
Para hacer el descubrimiento, tuvo que comparar cientos de miles de fuentes de rayos X, recogidas de forma aleatoria, con las posiciones de millones de galaxias. Normalmente, cada galaxia contiene un agujero negro supermasivo en su centro que a veces se ilumina en rayos-X. Sin embargo, la estrella descubierta por Heida no se encuentra en el centro del sistema. De todos modos, bajo los rayos X el objeto es tan brillante que puede ser comparado con otros brillantes agujeros negro supermasivo en el universo.
Un agujero negro supermasivo en el centro de una galaxia fácilmente pesa más de mil millones de veces la masa del sol. Tal objeto pesado podría encontrarse fuera del centro del sistema si se repliega a una velocidad considerable. La expulsión puede tener lugar en condiciones especiales, como la fusión de dos agujeros negros, informa 'Science Daily'.
El nuevo agujero negro recién formado después del proceso de fusión, salió disparado del centro del sistema a gran velocidad. En los últimos años diversas predicciones se han hecho sobre la velocidad a la que el agujero recorre esa distancia. Estos cálculos sólo recientemente han llegado a ser posibles, ya que requieren equipos muy poderosos. Los cálculos revelan que la velocidad del agujero depende principalmente de la dirección y la velocidad con la que los dos agujeros negros giran alrededor de su eje antes de la fusión.
Para Heida, el resultado de la investigación es probablemente la punta del iceberg. "Hemos encontrado más extrañas fuentes de rayos-X de esta clase. Sin embargo, para estos objetos necesitamos en primer lugar las medidas exactas del telescopio espacial Chandra para determinar sus características con mayor precisión." Encontrar más agujeros negros en retroceso proporcionará una mejor comprensión de las características de los agujeros negros que se fusionan.
En el futuro, incluso podría ser posible observar este proceso con el proyectado satélite LISA. Los astrónomos esperan usar este satélite para medir las ondas de gravedad que la fusión de dos agujeros negro emiten. Por último, esta información debe decirnos si un agujero negro supermasivo en el centro de las galaxias es el resultado de muchos más agujeros negros ligeros que se fusionan.
