La música fuerte prolonga hasta cinco días los efectos del éxtasis sobre el cerebro

Actualizado: jueves, 16 febrero 2006 10:02


MADRID, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -

La música fuerte prolonga hasta cinco días los efectos en el cerebro del consumo de éxtasis, según un estudio del Instituto de Neurología de Italia y la Universidad Magna Graecia en Catanzaro (Italia) realizado en ratas y que se publica en la revista 'BioMed Central Neuroscience'.

El estudio muestra que la reducción de la actividad cerebral de las ratas inducida por el éxtasis o 3,4-Metilenodioximetanfetamina (MDMA) se prolonga tiempo después de que se les haya administrado la droga si los animales están escuchando música a niveles elevados cuando la toman.

Los científicos inyectaron a ratas una dosis baja o alta de MDMA, de 3 mg/kg y 6 mg/kg respectivamente, o una solución salina. Las ratas fueron expuestas a un ruido con una frecuencia estable que se encuentra en muchos tipos de música electrónica o bien se las mantenía en ausencia de estimulación acústica. El sonido que escuchaban ascendía a los 95 dB, la intensidad máxima permitida en clubes nocturnos según la legislación italiana.

Los investigadores controlaron la actividad electrocortical de las ratas utilizando electrodos colocados sobre el cráneo, desde los 60 minutos anteriores a la administración de la droga y el comienzo de la música, hasta cinco días después de que la música se detuviera.

Los resultados muestran que una dosis baja de MDMA no modificó la actividad cerebral de las ratas en comparación con el suero salino, siempre y cuando la música no sonara. Sin embargo el electro de las ratas a las que se proporcionó la dosis baja disminuyó cuando la música alta sonaba.

Según los científicos, la dosis elevada de MDMA indujo una reducción de la actividad cerebral al comparar ésta con la de los animales a los que se administró la dosis baja y el suero salino.

Esta reducción se intensificó una vez que se apagó la música y duró hasta cinco días después de la administración de la droga. En las ratas que tomaron la mayor cantidad de droga pero que no fueron expuestas a la música fuerte, la actividad cerebral volvió a la normalidad el día siguiente a que tomaran la droga.