MADRID, 26 Ago. (EUROPA PRESS) -
Las nuevas instalaciones de resonancia magnética del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús, que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, inauguró el pasado mes de octubre, funcionan ya a pleno rendimiento una vez finalizado el periodo de prueba.
El equipo permite realizar técnicas avanzadas de diagnóstico por imagen, con el objetivo de mejorar la atención de los pacientes pediátricos, reducir los tiempos de respuesta y agilizar el diagnóstico de enfermedades graves de los niños. Desde su inauguración, el centro ha realizado un total de 1.830 exploraciones.
La incorporación de esta tecnología de última generación, que no emite radiación ionizante, ha permitido a los profesionales sanitarios obtener excelente información acerca de alteraciones orgánicas y funcionales del sistema nervioso central, patología de la médula ósea, oncología general y estudios vasculares de los pacientes pediátricos.
Asimismo, desde el pasado 1 de julio, el Servicio de Diagnóstico por Imagen realiza resonancias magnéticas en turno de tarde de 15.00 a 22.00 horas, de lunes a viernes, además de en turno de mañana, para poder practicar un mayor número de resonancias magnéticas y atender así la creciente demanda de este tipo de exploraciones específicas que garantizan la precisión en el diagnóstico.
TÉCNICAS MÁS AVANZADAS
Los profesionales del Servicio de Radiodiagnóstico del centro, que dirige la doctora Gloria Gómez Mardones, son especialistas en exploraciones pediátricas y realizan las técnicas más avanzadas para llevar a cabo estudios con un alto grado de resolución, entre los que destacan los de patologías del sistema nervioso y oncológicas.
El objetivo es valorar el grado de extensión de los tumores y tener más información sobre el estadio de la enfermedad. El tiempo medio que se dedica a cada paciente es de aproximadamente 60minutos, dependiendo del procedimiento.
Entre las técnicas más empleadas por el equipo de radiólogos del hospital está la resonancia magnética corporal total, que valora, con un estudio pormenorizado de todo el cuerpo, la posible metástasis o afectación tumoral; la angio-resonancia magnética, que permite realizar un estudio vascular del paciente; la resonancia por difusión-perfusión, que efectúa estudios neurorradiológicos en pacientes oncológicos y la espectroscopia por resonancia magnética, que permite el análisis bioquímico de lesiones cerebrales pediátricas.
