PALMA DE MALLORCA, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
Tres de cada diez jóvenes de Baleares con edades comprendidas entre los 15 y 29 años reconoce que ha realizado dieta en alguna ocasión y la mitad de ellos lo ha hecho sin contar con ningún tipo de supervisión médica, sobre todo mujeres de entre 20 y 24 años y aquellos que tienen un peso insuficiente.
Así lo manifestó hoy la directora general de Ordenación, Innovación y Formación del Profesorado, Joana Rosselló, que indicó que estos datos demuestran que la preocupación por tener una figura "esbelta y aceptada" es "elevada", por lo que, a su juicio, es "muy importante" trabajar tanto la autoestima como la alimentación de estos jóvenes.
Rosselló hizo estas declaraciones durante la firma de un convenio con Obra Social Caixa Catalunya según el cual unos 38.000 alumnos de entre ocho y doce años de Baleares participarán este año en el programa didáctico 'Com Menjam', que va dirigido a infundir en los escolares preadolescentes hábitos alimenticios correctos y saludables a fin de prevenir la obesidad y para evitar el desarrollo de un trastorno en la conducta alimenticia.
Con el objetivo de eliminar estas enfermedades de la población infantil, el programa 'Com Menjam', que se desarrollará en las aulas de 353 centros de las islas, tratará de "potenciar el autoconocimiento y la auto aceptación de los escolares como medida preventiva de la anorexia y la bulimia", explicó el director de la Fundación, Josep Solans, que recordó que el cuatro por ciento de los niños españoles padece anorexia o bulimia. La prevalencia de la anorexia nerviosa ronda el 0,5 y el 1 por ciento de los jóvenes españoles entre 14 y 25 años, mientras que la bulimia afecta entre el 2 y el 3 por ciento de los niños en edad escolar. Asimismo, el coste generado en las Sanidad Pública española para el tratamiento de la obesidad es del 7 por ciento de gasto global (2.500 millones de euros anuales), y según señaló Solans, lo más grave es que cerca del 6 por ciento de los jóvenes obesos fallece, de los que un 27 por ciento se quita la vida voluntariamente.
Por su parte, Rosselló confió en que el programa, impulsado en Aragón y Madrid con excelentes resultados, sea un "acierto" para reducir los casos de obesidad y de trastornos alimenticios que se registran en la Comunidad Autónoma, de los que no ofreció detalles.
Solans señaló que 'Com Menjam' no es un programa nutricional donde se hable de proteínas y carbohidratos, sino que "se intentarán corregir los hábitos alimenticios incorrectos para evitar enfermedades muy complejas de paliar una vez están presentes en la persona". Solans insistió en la importancia de que la familia se implique a fondo en el programa para que se culmine con éxito.
Según detalló, el programa se centrará en tres ámbitos, que son, el personal, para promover la aceptación de los cambios físicos y potenciar la autoestima, el familiar, para corregir posibles desequilibrios en la dieta del alumno, "donde la figura de la familia será imprescindible", matizó, y el cultural, para analizar la influencia que el entorno, los medios de comunicación y la publicidad tienen sobre los escolares de Educación Primaria. "Es muy importante potenciar el diálogo entre los alumnos, implicar a las familias y promover su autonomía para que sean responsables de su propia alimentación", señaló el director de 'Vibre i Conviure', tras recordar que en la Educación Secundaria muchos jóvenes empiezan a comer solos en casa sin a penas un control sobre su alimentación.
En este sentido, explicó que, para incentivar y motivar al alumno a involucrarse en el programa, los profesores les animarán a participar en un concurso, para que los más pequeños (de ocho a diez años) elaboren un plato con "cara y ojos", y los mayores (de diez a doce años) un menú con una dieta equilibrada que contenga todos los alimentos imprescindibles.
El equipo ganador será premiado con una cámara fotográfica digital y los profesores recibirán un portafolios de piel.
