VALENCIA, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
El concejal delegado de Circulación y Transportes en el Ayuntamiento de Valencia y presidente de la Empresa Municipal de Transporte (EMT), Alfonso Novo, anunció hoy que en mayo de este año serán 70 los vehículos de la flota de autobuses urbanos que funcionarán con gas natural comprimido, según informaron hoy en un comunicado fuentes municipales. Esta cifra supondrá que el 15 por ciento del total de vehículos utilizará este recurso natural, un combustible limpio de menor impacto ambiental, destacaron.
Novo participó hoy en la mesa redonda 'Energía y Tecnología Limpias', celebrada en Feria Valencia, en el marco de Ecofira. Durante su intervención en este debate, el edil manifestó el "compromiso" y el "esfuerzo" del consistorio valenciano y de la EMT por ofrecer "un transporte público de calidad y medioambientalmente sostenible". Recordó que todos los vehículos diesel de la flota municipal cumplen con la llamada Normativa Euro de aplicación.
Las iniciativas del Ayuntamiento de Valencia para hacer del transporte urbano un sistema sostenible se basan en la utilización de combustibles alternativos como el gas natural comprimido, además del biodiésel, el hidrógeno y un híbrido diésel-eléctrico, comentaron las mismas fuentes.
Asimismo, indicaron que a ello se suman las operaciones de limpieza y mantenimiento de vehículos que se llevan a cabo según las directrices del Proyecto Urbanbat, un sistema que incorpora tecnologías mejoradas para el tratamiento de los residuos líquidos que se generan por las tareas de limpieza.
El concejal explicó las características y ventajas de cada una de estas acciones de mejora medioambiental. En el caso del gas natural comprimido, comentó que se trata de un combustible limpio que permite reducir las emisiones gaseosas (monóxido de carbono, dióxido de azufre e hidrocarburos, entre otras) a niveles inferiores a los establecidos. Además, se rebajan también las vibraciones y el ruido de los vehículos. Esto ha hecho que los autobuses a gas adquiridos por la EMT disponen de la Normativa Europea EVV (Vehículo Ecológicamente Mejorado).
En marzo de 2004, la Empresa Municipal de Transportes de Valencia inició la utilización del combustible Biodiésel en el marco del programa cofinanciado por la UE Life-Ecobus, comentaron las mismas fuentes, que recordaron que este programa consistía en recoger el aceite vegetal usado y transformarlo en biodiésel para ser utilizado como combustible.
En estos momentos, un 21,66 por ciento de la flota municipal de autobuses se mueve con este sistema de energía que, además de reutilizar el aceite vegetal, reduce las emisiones a la atmósfera.
Por otro lado, por lo que respecta a los autobuses con motor eléctrico, destacaron que en estos momentos la EMT dispone de tres modelos európolis minibús de 7,4 metros que, además de las bajas emisiones de elementos contaminantes que presenta, suma la ventaja de que está adaptado para personas con movilidad reducida, agregaron.
Alfonso Novo habló también durante su intervención del uso de hidrógeno como combustible, un proyecto que comenzó en enero de 2006 tras la creación, por parte de siete ciudades españolas (Valencia, Madrid, Barcelona, Pamplona, Tenerife, Málaga y San Sebastián) de la Agrupación de Operadores Españoles, AOE.
El Ayuntamiento de Valencia adquirirá, previsiblemente a finales de este año (una vez estén disponibles), dos vehículos que utilizan este elemento para su movilidad. Las ventajas del hidrógeno, según el delegado de Transportes, son su carácter no contaminante, ya que únicamente genera agua como subproducto, y su seguridad como combustible, según las mismas fuentes que apuntaron que a pesar de ello su obtención es complicada y cara.
LIFE-URBANAT
Por otro lado, el programa Life-Urbanbat, cofinanciado también por la UE, contempla el tratamiento de los residuos líquidos que se desprenden del lavado de carrocerías, motores, baterías y enjuague de radiadores, así como los residuos que integran los líquidos refrigerantes, de frenos y los ácidos de baterías agotadas.
En unos casos se logra reutilizar casi al cien por ciento de las aguas de lavado o los líquidos, mientras que en otros se consigue reducir la carga contaminante de determinados residuos hasta niveles admisibles, comentaron las mismas fuentes.
Novo señaló que ante los retos en materia medioambiental que plantea la sociedad actual (disminución de la contaminación, diversificación de las fuentes de energía y reducción de los residuos y del consumo de agua), el Ayuntamiento de Valencia ha respondido con convicción a través de acciones, como las citadas, referidas al uso de combustibles ecológicos y a los proyectos innovadores, así como mediante la continua renovación de la flora de autobuses y la implantación del Sistema de Gestión Medioambiental ISO 14001.
