VALENCIA, 25 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Instituto Tecnológico de Óptica, Color e Imagen (AIDO), miembro de Redit, desarrolla, en colaboración con la empresa valenciana Biótica y el Instituto de Catálisis y Petroleoquímica (ICP) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), un dispositivo láser que permitirá medir la concentración de legionela en el agua de los sistemas de refrigeración industriales, con el objetivo de detectar de manera instantánea la presencia de la bacteria, según informaron en un comunicado fuentes del centro tecnológico.
Este dispositivo se podrá aplicar en los circuitos de refrigeración en los que la legionela suele proliferar, como son los hoteles con spa, los hospitales, las clínicas, las residencias de la tercera edad, los balnearios, los colegios, las piscinas o los polideportivos. Se trata de recintos que, al tener torres de refrigeración y sistemas de distribución de agua, suelen ser focos de infección.
En este sentido, explicaron que, "hasta el momento, los sistemas de cultivo existentes en el mercado tardan una media de dos semanas en detectar la bacteria de la legionela, y si se tiene en cuenta que el periodo de incubación en las personas es de unos 10 días, cuando se detecta un brote ya es tarde para impedir muchos de los contagios".
Así, mediante este proyecto "se conseguirá detectar la bacteria en el agua en tan sólo 30 minutos, por lo que se convertirá en un sistema de control eficaz en materia preventiva para evitar este tipo de epidemias", resaltaron.
La infección por legionela es una enfermedad bacteriana que puede derivar en una infección pulmonar (neumonía) con fiebre alta o síndrome febril agudo. Esta bacteria habita de manera natural en aguas superficiales y acuíferos, sin embargo, bajo determinadas condiciones ambientales puede multiplicarse hasta alcanzar concentraciones altamente peligrosas.
En concreto, la legionela se reproduce fácilmente en el agua estancada, sobre todo, cuando su temperatura oscila entre los 25 y los 45 grados. También propicia su infección la presencia de materia orgánica, corrosión o incrustaciones de cal en los conductos en los que se encuentra dicha agua.
El informe sobre el número y las tasas de incidencia de las enfermedades de declaración obligatoria publicado por el Ministerio de Sanidad el año pasado revela que en la Comunitat Valenciana 245 personas contrajeron legionelosis en 2007. Estos datos sitúan a la autonomía a la cabeza del país, con una tasa de incidencia de 6,14 casos por 100.000 habitantes, muy por encima de la media nacional que se sitúa en 2,79 afectados por 100.000 habitantes. Otras regiones con incidencia de legionela son Cataluña con 202 casos; Andalucía con 159; y el País Vasco con 100.
