ALICANTE, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
La conselleria de Infraestructuras y Transporte reconstruirá con arena de mármol y cemento blanco el contenedor del vaso de la Fuente de Luceros, "materiales que garantizará su estanqueidad", según informaron hoy en un comunicado fuentes de la Generalitat valenciana.
La decisión de derribar el vaso, adoptada Màrius Bevià, director técnico del desmontaje, fue tratada en las reuniones de coordinación con el Ayuntamiento de Alicante. Según el "criterio experto" de Bevià, la pieza original estaba realizada con una mezcla de piedra, tierra y escombro, cubierta con una fina capa de mortero, "materiales de baja calidad que habían provocado múltiples filtraciones de agua y cal hacia la piscina que rodea a la fuente".
Así, se llevó a cabo su derribe "siendo posible respetar y conservar los elementos de valor artístico presentes en la pieza, y habiendo extraído moldes de todo el monumento que permiten reproducir el vaso con idéntico aspecto al original".
Los trabajos comenzaron en la tarde de ayer jueves, 26 de octubre, y continuaron hasta su conclusión, "entrada la noche, para no sufrir demoras que retrasarían las obras y, por lo tanto, ajustaría los plazos para devolver a la fuente su ubicación original en mayo". Además, se cortó la base del núcleo central y se procedió a su embalaje. "Esta pieza permanecerá en el recito de obra, mientras que el resto de secciones se encuentran ya en Tabacalera".
En este sentido, Infraestructuras reconstruirá el contenedor del vaso 'in situ', a partir del mes de enero, una vez ejecutada la losa de cubrición de la estación. A partir de los moldes extraídos de todo el monumento, se realizará "con aspecto idéntico a la original, en materiales de alta calidad, con arena de mármol y cemento blanco, que garantizarán su función, la contención del agua, sin filtraciones", mientras que sobre el monumento de Daniel Bañuls se llevará a cabo una restauración integral en el recinto custodiado de Tabacalera.
El paso del tiempo, y la constante exposición al agua, han hecho que aparezcan en la Fuente de Luceros, entre otras patologías, grietas producto de la oxidación de las varillas metálicas y de las juntas de unión de diversas secciones, "proceso que afecta a los materiales de los cuales se componen los cuerpos escultóricos".
Dichos procesos fueron "parcialmente neutralizados" con la restauración a la que fue sometida la fuente en el año 2003. No obstante, "la edad del monumento", la naturaleza de los materiales empleados en su construcción original y la acción del agua, "han hecho que ciertos problemas estructurales persistan y provoquen la reaparición de fisuras y filtraciones".
Mañana sábado, 28 de octubre, concluirán los trabajos de desmontaje de la Fuente de los Luceros, "con el corte y embalaje de las cenefas y elementos de valor artístico", y la demolición de la última sección de la base central de mampostería.
Para mayo del año próximo se prevé que la fuente regrese a su ubicación original donde, una vez instalada, "especialistas en restauración le aplicarán un tratamiento y la rehabilitación 'in situ' de aquellas partes que han permanecido en el recinto de obra".
