VALENCIA, 25 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda destinará en 2008, bien a través de inversiones directas o bien mediante subvenciones, un total de 5.668.230 euros a la mejora de la red de áreas de cortafuegos para la prevención de incendios de la Comunitat Valenciana, según informaron hoy en un comunicado fuentes de la Generalitat.
Con la finalización de estos trabajos, según sostuvo la directora general de Gestión del Medio Natural, María Ángeles Centeno, "se habrá asegurado la protección integral contra el fuego de más de 87.000 hectáreas forestales de la Comunitat", mediante las actuaciones de mantenimiento y mejora en un total de 4.371 hectáreas de la red de áreas cortafuegos.
Estas actuaciones, según señaló, siguen la metodología desarrollada en el Plan de Selvicultura Preventiva de la Comunitat que tiene como objetivo, la realización, mantenimiento y mejora de esta red de áreas de cortafuegos. A su juicio, éstas "conforman una infraestructura básica, que en caso de producirse un incendio permite una actuación rápida, segura y eficaz de los medios de extinción", añadió.
Para reforzar el mantenimiento de estas zonas, señaló que se ha buscado, además, la utilización de sistemas alternativos "como el pastoreo controlado entendido como elemento de control del exceso de vegetación y que se desarrolla mediante un régimen de subvenciones al que pueden acceder los ganaderos".
"Las premisas de este plan" son la planificación "en el tiempo y en el espacio" de los trabajos de Selvicultura Preventiva en la Comunitat, así como desarrollar "una metodología de ejecución de estos trabajos en función de la tipología de las masas forestales", destacó la directora general.
Este tipo de proyectos ya se han desarrollado en diferentes sierras de las tres provincias de la Comunitat, y durante este año se ha destinado "una importante partida para la conservación de todos estos trabajos".
Otra de las características del plan, según explicó, es la de considerar la Ordenación Territorial como "una herramienta fundamental" en la planificación de las infraestructuras de prevención de incendios forestales, "el uso del concepto de planificación global independientemente del régimen de propiedad de las masas forestales", y la estructuración de las áreas cortafuegos "en diferentes órdenes de magnitud".
