El Consell pide al Gobierno que la directiva europea sobre petardos garantice la cultura y no perjudique al sector

Actualizado: domingo, 19 abril 2009 16:47

VALENCIA, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -

El conseller de Gobernación, Serafín Castellano, solicitó hoy al Gobierno central que la trasposición de la directiva europea sobre fabricación y uso de petardos "garantice la cultura y tradiciones centenarias" de la Comunitat y no perjudique al sector pirotécnico, que es "puntero en España y representa entre el 40 y 45 por ciento de la producción y actividad nacional", por lo que los valencianos --añadió-- "no pueden quedar excluidos en la elaboración del documento".

Así lo explicó Serafín Castellano, durante la rueda de prensa que ofreció hoy junto al eurodiputado del PP José Manuel García Margallo, tras mantener una reunión con el colectivo pirotécnico y alcaldes y portavoces del PP para abordar cómo afectará la trasposición de la directiva europea sobre el material pirotécnico que prepara el Gobierno y para que los afectados "aporten sus ideas y puntos de vista" al respecto.

Castellano señaló que la Generalitat ya ha remitido al Ministerio de Industria, Turismo y Comercio un informe elaborado por una Comisión Técnica encargada de estudiar la situación y en el que le trasladan las propuestas valencianas para el desarrollo de la norma.

Según dijo, el texto que elabore el Ejecutivo "puede afectar a la esencia de la cultura de la Comunitat", por lo que su formación propondrá al Gobierno que se excluyan actos tradicionales de la aplicación de la trasposición.

Al respecto, explicó que la directiva europea recoge prohibiciones como la de los "artículos pirotécnicos que tengan un movimiento errático o imprevisible", lo que supondría, "si no se compatibiliza la seguridad con la tradición, la desaparición de las 'cordaes', 'correfocs' o 'despertaes', que se realizan desde tiempos inmemoriales en la Comunitat".

Por ello, propuso que estos elementos que prohíbe la disposición comunitaria "sean de uso exclusivo para estas festividades en España y sean autorizados por las administraciones públicas competentes", de manera que aunque "se prohíba la venta al público, se limite su adquisición a asociaciones y profesionales del sector". Así, solicitan "una clara diferenciación entre el uso que hagan los profesionales en actos y fiestas de fuego, del uso genérico que realicen por particulares en cualquier tipo de evento".

En cuanto a la compra y uso de petardos por menores, plantean que pueda continuar "como hasta ahora", pero "bajo la supervisión y responsabilidad de un adulto" y "con la formación no reglada específica para que sepan utilizar y dar buen uso del material pirotécnico".

COMISIÓN TÉNCICA

El conseller destacó que el 95 por ciento de los 592 municipios de la Comunitat Valenciana celebran festividades con fuego, por lo que "el PP va a defender aquí, en Europa y donde haga falta nuestras tradiciones y nuestras señas de identidad". Así instó al Gobierno a crear una Comisión Técnico Jurídica de trabajo integrada por las administraciones públicas con competencias en pirotecnia, además de otros agentes implicados".

De esta forma, urgió al Ejecutivo central a que "escuche las inquietudes y preocupaciones de los ciudadanos de la Comunitat Valenciana sobre este asunto para preservar unas fiestas tradicionales de tanto arraigo en nuestra tierra, que, además, da trabajo a alrededor de 1.500 personas". Para ello, pidió al Gobierno que "aproveche la flexibilidad que presenta la disposición comunitaria".

"VENTANA AL GOBIERNO"

Por su parte, el eurodiputado popular José Manuel García Margallo se pronunció en la misma línea y aseguró que el Gobierno "puede en este momento establecer unas normas que permitan la celebración de las fiestas en los términos que se han realizado siempre, por eso, desde el Gobierno valenciano se ha estado atento en Europa". La Unión Europea "ha hecho su trabajo al abrir una ventana al Gobierno español y éste tiene que utilizarlo para que las cosas estén como han estado siempre", dijo.

Además, se mostró "profundamente optimista" a la hora de tener el apoyo de todas las fuerzas políticas, como ocurrió en Europa, "para que el Ministerio de Industria atienda a las peticiones, pues reuniones como las de hoy y la presión de los medios de comunicación obligarán al Gobierno a tener buen cuidado en hacer el uso absoluto que permita la directiva europea para que las fiestas se celebren como siempre se han hecho". No obstante, advirtió que el texto "tiene que estar terminado antes de enero de 2010, por lo que no queda mucho tiempo".