VALENCIA, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
La ciudad de Valencia acogerá una exposición y un congreso internacional con motivo del décimo aniversario del descubrimiento de los frescos renacentistas de los ángeles músicos en la Catedral de Valencia, hallados el 22 de junio de 2004 tras permanecer más de 300 años ocultos tras una bóveda barroca.
Según han informado desde el Arzobispado en un comunicado, desde su hallazgo en la bóveda gótica del altar mayor de la Catedral, y tras ser retirada la bóveda barroca que los ocultaba, los frescos han sido visitados por más de dos millones de personas.
Para conmemoran el décimo aniversario del hallazgo, habrá una exposición que será inaugurada el próximo 23 de junio y un congreso que se celebrará el próximo mes de octubre.
Por su parte, la exposición estará ubicada en el crucero de la puerta de los Apóstoles del interior de la Catedral durante tres meses y contará con fotografías a tamaño natural de los ángeles músicos, según han indicado desde el Instituto Valenciano de Conservación y Restauración de Bienes Culturales (Ivacor) que restauró las pinturas y que ha promovido la iniciativa.
Asimismo, la muestra incluirá las réplicas de los instrumentos medievales que llevan en sus manos los ángeles, una maqueta de la Catedral de Valencia así como el libro de fábrica del siglo XV, conservado en el archivo de la Seo y donde consta el contrato de encargo de las pinturas a los autores italianos Paolo San Leocadio y Francesco Pagano, que las iniciaron en 1476.
Igualmente, el Ivacor CulturArts y Música de CulturArts (Instituto de la Música) han organizado un congreso en Valencia para el próximo mes de octubre que se tratará el programa de conservación y el seguimiento pormenorizado de las condiciones medioambientales de las pinturas e incluirá también una parte musical surgida a raíz del estudio y reproducción de los instrumentos musicales representados.
Entre otros aspectos, en el congreso se tratará el sistema de conservación preventivo, pionero en el mundo instalado en la Catedral por el que, a través de 72 sensores electrónicos ofrece datos sobre la humedad, temperatura, movimiento y luminosidad, y cuyos parámetros son registrados cada 60 minutos.
Además, el congreso estará coordinado por el sacerdote e historiador del Real Colegio Seminario Corpus Christi de Valencia, Miguel Navarro y el presidente de la comisión diocesana de Patrimonio Histórico-Artístico, Jaime Sancho.
Asimismo, contará con físicos y químicos del Opificio delle Pietre Dure de Florencia, entre ellos Carlo Lalli, con el investigador de la NASA, Héctor d'Antoni, así como con el profesor de la Universitat Politécnica de Valencia, Fernando García Diego, y del arquitecto conservador de la Catedral Salvador Vila, entre otros.
EL HALLAZGO
Estos frescos fueron descubiertos el 22 de junio de 2004, tras permanecer 330 años ocultos. Las pinturas, realizadas por los artistas italianos Paolo San Leocadio y Francesco Paganno, entre 1476 y 1481, muestran doce grandes ángeles tocando instrumentos musicales de la época a lo largo de una superficie de unos 250 metros cuadrados de la bóveda y "suponen la obra más importante del Renacimiento Español y la que abre paso a este periodo artístico en la península", según ha explicado Jaime Sancho.
Las pinturas fueron encargadas a San Leocadio y Pagano por el entonces arzobispo de Valencia, Rodrigo de Borja, futuro papa Alejandro VI, durante una visita que hizo a España, ya como legado papal, para confirmar el matrimonio de los Reyes Católicos.
Los frescos llevaban ocultos desde que en 1674 se produjo la reforma barroca del presbiterio de la Catedral, cuando la bóveda original fue cubierta por otra de escayola, aunque situada a 80 centímetros de distancia "con la evidente intención de proteger las pinturas".
La cámara de aire que quedó entre ambas mantuvo los frescos casi intactos durante más de 300 años. Fue en junio del año 2004, al realizar unas catas durante la restauración del altar mayor cuando aparecieron los frescos en los que se podría apreciar los ángeles con instrumentos originales sobre un fondo celeste tachonado de estrellas doradas y en un asombroso estado de conservación.
Estas pinturas renacentistas de la Catedral de Valencia están consideradas como uno de los descubrimientos históricos y artísticos más importantes de los últimos años, y reflejan el gran periodo de esplendor que vivió la ciudad de Valencia y su reino durante el siglo XV.
