Cultura.- El VEO organiza hoy un desayuno en el Puente de la Mar y simulacros en el Mercado de Russafa

Actualizado: sábado, 20 febrero 2010 9:44

VALENCIA, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Festival València escena Oberta (VEO) se desplegará hoy por la ciudad con actividades lúdicas y gratuitas que aprovechan el espacio público. Así, de 11.00 a 14.00 horas, una alfombra roja sobre el Puente de la Mar acogerá una mesa de 90 metros donde los viandantes pueden compartir un gran desayuno al aire libre. En paralelo, a las 10.30, a las 11.30 y a las 12.30 horas, los altavoces del Mercado de Russafa van a reproducir diferentes situaciones de simulacro en mensajes de cuatro minutos, informaron hoy los responsables del certamen en un comunicado.

Un colectivo de jóvenes arquitectos y artistas valencianos y de otras ciudades de Europa están implicados en la iniciativa 'Desayunos con viandantes', un encuentro abierto que propone compartir un almuerzo con amigos y desconocidos para romper con la rutina doméstica e invitar a la conversación, la convivencia y la participación.

La actividad programada en el Festival VEO 2010, organizado por el Ayuntamiento de Valencia a través de la Fundación VEO, se realiza en la capital del Turia desde noviembre de 2008 y funciona de manera similar a otras convocatorias en ciudades como Madrid, Logroño o Puerto Rico, aunque su nacimiento se remonta a los años 90 en Viena.

Al primer Desayuno que se celebró en Valencia acudieron 20 personas, pero después de una docena de convocatorias el número de asistentes ha crecido considerablemente. Hasta el momento se han celebrado en diversos espacios de la ciudad como la terraza de la Iglesia de los Santos Juanes, bajo las Torres de Quart, en la rotonda de la Plaza de Zaragoza, o en un cruce de calles del barrio de Ruzafa, donde los organizadores consideraron las cuatro esquinas como una plaza y utilizaron la calzada y sus pasos de cebra como un tablero de parchís.

Ahora, en colaboración con el Festival VEO, se ha elegido como escenario el Pont de la Mar. Allí se colocará una larga mesa de cerca de 90 metros sobre una alfombra roja, que se han preparado para dar cabida a los numerosos participantes que se van a congregar en la explanada de seis metros y medio del monumento de 1591.

Como señalan sus organizadores, "el Desayuno no es una protesta ni una acción de signo político, sino una celebración de la calle que se identifica de forma festiva con una representación artística y urbana, que pretende descontextualizar los rituales domésticos e invertir el carácter que esos espacios tienen en las rutinas diarias de los viandantes que los ocupan".

Es también una invitación a reflexiones más profundas y un buen lugar para discutirlas, además de un punto de encuentro de diferentes colectivos de la ciudad en el que pueden establecerse contactos y encontrar apoyos y colaboraciones para iniciativas similares.

Para participar basta con acercarse al lugar elegido en la convocatoria con un termo de café, unas pastas, unos bollos o lo que al viandante se le antoje. Se convoca a través de mensajería electrónica, flyers, la web del colectivo y el siempre eficiente boca-oreja.

En consonancia con la línea conductora de esta edición del Festival València Escena Oberta, cuyo lema es la confrontación entre realidad y ficción, los altavoces del Mercado de Russafa reproducirán el sábado, 12 de febrero, a las 10.30, a las 11.30 y a las 12.30, diferentes situaciones de simulacro.

El objetivo de esta iniciativa es crear una situación lúdica en la que los visitantes del mercado aparquen la cotidianeidad de sus compras para sumergirse en la sorpresa y la extrañeza de una propuesta artística.

La iniciativa es el resultado de un taller artístico de cinco días desarrollado por un grupo de 12 alumnos de la Facultad de Bellas Artes bajo la supervisión de Vicente Arlandis y Sandra Gómez, y la colaboración del profesor Chema de Luelmo.

Este apartado del Festival lleva por nombre 'Móvil', y su objetivo es la utilización dramatúrgica del espacio público. En años anteriores, estudiantes de las escuelas valencianas de teatro, danza, música, diseño y bellas artes han participado en proyectos muy diversos cuya visibilidad se ha concretado siempre en las calles de la ciudad.

En esta ocasión, los participantes en la acción se servirán del sistema de megafonía del mercado municipal para fomentar en los visitantes y los vendedores la recreación de una situación que en realidad no está teniendo lugar.

Un simulacro consiste en la representación de una respuesta de emergencia ante los efectos causados por fenómenos o agentes perturbadores. La finalidad principal es testar y preparar una reacción eficaz ante un problema real.

CONSTRUCCIÓN DE LA REALIDAD

Para evitar situaciones de pánico y que el público sea consciente en todo momento de que nada de lo que se dice es real, las locuciones reproducidas, grabadas por los alumnos, se complementarán con advertencias sonoras de su condición de simulacro. El objetivo es crear una situación en la que el espectador reflexione sobre las formas de construcción de la realidad.

"Lo que proponemos es un juego entre fronteras, una ampliación de la ficción y de la realidad, o lo que es lo mismo, un aniquilamiento de ambos espacios, desdibujar la línea que los separa", aclaran los responsables del curso, Vicente Arlandis y Sandra Gómez, formados en arte dramático, danza y bellas artes.