Opina que "las cosas van a mejorar" por la mayor predisposición al consumo de quienes podían comprar pero temían perder su empleo
VALENCIA, 7 May. (EUROPA PRESS) -
El director general de Consum, Juan Luis Durich, considera que "si es verdad que van a funcionar un poco mejor las cosas, se debería exigir medidas" para crear empleo. "Yo no bajaría los impuestos, lo que haría es primar la creación de empleo y el empleo juvenil, no se puede tener a un 60 por ciento de los jóvenes parados". En este sentido, plantea "cuánto impuesto pagaría el padre que hoy tiene trabajo para que su hijo no estuviera sentado en el sofá".
Así lo ha señalado en la rueda de prensa de presentación de resultados, en la que se ha referido a 2013 como "un año especialmente satisfactorio" por los datos obtenidos y ha reiterado su intención de "crecer a menor ritmo" en resultados que en ventas porque su prioridad es "mantener empleo e innovación" y apostar por una rentabilidad a largo plazo, conscientes de que es "relativamente sencillo" aumentar beneficios "con cuatro medidas duras como otros".
Consum cerró 2013 con un resultado de 32,2 millones, un 0,33 más que el año anterior, y una facturación de 1.840,3 millones, un 4,31 por ciento más, creó 537 empleos netos y abrió 32 supermercados.
Según Durich, la recuperación "va a ir por barrios" y, en concreto, "la alimentación se va a mover poco, que nadie espere milagros", a pesar de que "el consumo mejore ligeramente".
Argumenta que, en este sector, "el consumidor ha adquirido ya unos hábitos, se ha encontrado razonablemente bien y no hay un motivo, incluso aunque empiece a mejorar su economía, para que cambie esos hábitos", tales como el fuerte crecimiento de la marca propia y la compra de productos más económicos. "Se cambia la ternera por pollo y el jamón ibérico por el normal para cuadrar cuentas", apunta.
El director general de Consum opina que "el que cambió el arroz de una marca por el arroz Consum y ha visto que es tan bueno o mejor que el otro, que le da un buen servicio y se ahorra el 20 por ciento", ahora "no tiene por qué cambiar" esa costumbre "aunque le mejore la nómina o sólo la confianza en que las cosas van a ir a mejor".
Así, mantiene que "las cosas van a mejorar pero más porque van a estar más predispuestos --a consumir-- los que no han padecido tanto que por los que se han quedado en el paro", ámbito en el que opina que "la situación continúa siendo igual de mala" y requiere "medidas mucho más radicales". "Esta situación no se debería permitir", zanja.
"LA ECONOMÍA NO VA MEJOR"
A su juicio, "la economía no va mejor", sino que "va a ir mejor porque el 70 por ciento de los que no han perdido el trabajo tenían un miedo importante a perderlo pasado mañana y no se compraban un coche aunque se lo pudieran comprar porque estaban asustados".
Durich indica que, por este motivo, "en la medida en que ese miedo vaya desapareciendo, algunos movimientos en algunos sectores van a ser más perceptibles, como está sucediendo con los automóviles", mientras que la alimentación creció un 0,1 por ciento hasta marzo.
