VALNCIA, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Cs en el Ayuntamiento de Valncia, Fernando Giner, ha asegurado este miércoles que la directiva despedida de la Empresa Municipal de Transportes a raíz de la estafa de cuatro millones de euros sufrida por la entidad, y cuyo despido ha sido considerado improcedente por un juzgado, "es una víctima más" de las políticas del alcalde, Joan Ribó, y el concejal de Movilidad y presidente de la EMT, Giuseppe Grezzi, que considera que queda como "responsable político" de esa estafa.
Giner anuncia que su grupo informará al Tribunal de Cuentas de la sentencia y pedirá convocar un Consejo de Administración Extraordinario de la EMT. "La trabajadora despedida es una víctima más de las políticas de Ribó y Grezzi", ha afirmado Giner, quien ha indicado que en el pleno extraordinario sobre EMT del lunes 25, volverán a exigir "responsabilidades políticas". "La sentencia refleja que no hubo voluntariedad por parte de la trabajadora, mientras ha sido culpada injustamente", ha lamentado el portavoz de Cs.
"Nuestra hoja de ruta ahora es informar al Tribunal de Cuentas de dicha sentencia, pues creemos que el despido de la empleada es clave en todo este proceso, desde el punto de vista de las responsabilidades como gestor de Grezzi y del anterior gerente y, además, vamos a convocar un Consejo de Administración Extraordinario de EMT, para que Grezzi dé cuenta de todos los pormenores de este asunto clave y asuma de una vez responsabilidades en el seno de la empresa", ha detallado el portavoz naranja.
Por su parte, el concejal de Cs, Narciso Estellés, miembro del Consejo de Administración de la EMT, ha manifestado que en el informe de conclusiones de la Comisión de Investigación sobre el fraude de la EMT, su grupo expresó "claramente que la responsabilidad era exclusivamente directiva y política, dejando al margen a la trabajadora, que también fue estafada. Incluso el informe pericial de Telefónica, muy anterior a la sentencia, ya lo corroboraba".
"Grezzi imputó injusta y subjetivamente la única responsabilidad del fraude a la trabajadora y tomó negligentemente en primera persona la decisión de su despido", ha criticado Estellés. A su juicio, "que un político tome la decisión última de despedir a un trabajador significa que Grezzi, en vez de intentar gestionar una empresa pública con criterios empresariales, ha decidido crear un holding político alrededor de la marca Compromís. Definitivamente, se tiene que ir de la EMT por el bien presente y futuro de la empresa".
