Más de 10.000 valencianos irán el sábado a Madrid para dar "un toque de atención" a Gobiernos y patronal por la crisis

Actualizado: miércoles, 9 diciembre 2009 14:22

Los sindicatos dicen que sus propuestas son "muy coincidentes" con la CEV, pero no tienen "nada que ver" con los presupuestos del Consell

VALENCIA, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -

Más de 10.000 ciudadanos de la Comunitat Valenciana se desplazarán el sábado a la manifestación convocada por CCOO y UGT para dar "un toque de atención" a los gobiernos central y autonómico y a las patronales por la situación económica y advertirles de que no están "dispuestos" a que sean los trabajadores "los paganos de la crisis". Las federaciones valencianas de ambos sindicatos han dispuesto autobuses y trenes para que los valencianos acudan de forma "masiva" a la protesta.

Así lo indicaron hoy los secretarios generales de CCOO-PV y UGT-PV, Paco Molina y Conrado Hernández, respectivamente, en una rueda de prensa ofrecida para dar a conocer los detalles de la movilización que pretende la defensa del bienestar social y reclamar a las administraciones públicas "inversiones productivas, ocupación y protección social".

En este sentido, Paco Molina manifestó que "no sólo los sindicatos apuntan a la necesidad de un nuevo patrón de crecimiento productivo para la Comunitat", sino que las propuestas de los agentes sociales son "muy coincidentes con otras de carácter empresarial que se han puesto encima de la mesa recientemente", en relación al documento de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), que en un informe abogó por consensuar una reforma de modelo económico centrada en mejorar la calidad de vida, la innovación y la sostenibilidad.

Para el secretario general de CCOO-PV, el documento de la CEV, titulado 'Objetivo: Competitividad. Reforma del modelo económico valenciano', es "una buena base para el desarrollo productivo de la Comunitat". Además, criticó que "nada tiene que ver con la propuesta económica que se desarrolla con los presupuestos de la Generalitat valenciana" para el año 2010.

Al respecto, manifestó que "se necesitan recursos y políticas públicas para consolidar un modelo productivo diferente", y las cuentas del Consell para el próximo ejercicio, "más que ahondar en esa línea, la desprotegen", censuró el dirigente sindical.

A su juicio, uno de los motivos "fundamentales para que los sectores funcionen es que fluya el crédito que, hoy por hoy, es el peor de los enemigos del sistema valenciano porque no está fluyendo e impide a muchas empresas continuar con sus actividades". Además, abogó por la implementación de un modelo productivo basado en la innovación, la investigación y el desarrollo, la puesta en marcha de políticas energéticas "alternativas", y la inversión en infraestructuras generadoras de empleo, como el desarrollo de la Ley de Dependencia o la red de educación infantil de cero a tres años.

PRESTACIÓN POR DESEMPLEO

Por su parte, Conrado Hernández señaló que, "ante la crisis, mientras no se genere empleo suficiente, es necesario que haya prestación para los desempleados". En cuanto a las propuestas para salir de la actual situación económica, subrayó que existen "sectores básicos que hace falta mantener, porque son los que más empleo generan".

Así, la construcción, el automóvil, el turismo y el sector químico son "básicos para mantener el máximo nivel de empleo posible", mientras que existen otras parcelas, que consideró "emergentes" y entre las que citó los alimentos procesados, la reparación naval, la construcción ferroviaria, o los sistemas sociales y educativos.

El secretario general de UGT-PV afirmó que los dos sindicatos están dispuestos a hablar con la Confederación de Organizaciones Empresariales de la Comunitat Valenciana (Cierval) para "sentar un acuerdo", aunque matizó que, "después, lo tiene que desarrollar en la parte que le toque al Gobierno valenciano". De este modo, instó a los responsables de la región "a ponerse las pilas", y a "hacer un poco de caso" a los sindicatos.

Por otro lado, preguntado por la posibilidad de convocar una huelga general, criticó que hay una "cierta obsesión" y que este tipo de protesta se han hecho "históricamente contra aquellos Gobiernos que han agredido los derechos de los trabajadores". No obstante, manifestó que este es "un toque de atención muy importante para todo lo que tiene que ver con el futuro del país".

Al respecto, Molina explicó que la movilización del sábado "forma parte de la estrategia de presión y negociación" y "es un toque de atención a empresarios y gobiernos para que no tengan tentación alguna de transferir la crisis a los sindicatos, a los trabajadores, y a las capas más débiles de la sociedad". Así, advirtió de que, "si esas tentaciones toman otro camino, se darán las respuestas adecuadas".