Insta a recibir con alegría a Cañizares, "un hombre bueno y siempre de Dios" con "prudencia, fortaleza, valentía, firmeza y misericordia"
VALENCIA, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -
El hasta ahora arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, designado este jueves por el Papa Francisco nuevo arzobispo de Madrid, se ha dirigido en una carta a los valencianos en su despedida, en la que les asegura que "siempre" estarán en su corazón. "Os he querido y lo seguiré haciendo de otra manera, pero habéis realizado la conquista de mi corazón, en el que siempre estaréis todos los valencianos", ha señalado el prelado.
Así lo ha expresado el arzobispo quien ha presidido este jueves a las 12.00 horas el rezo del Ángelus en el Palacio Arzobispal, momento en el que se hacía oficial su nuevo nombramiento al frente de la Iglesia de Madrid tras la renuncia por edad del que ha sido prelado de la diócesis de la capital, Antonio María Rouco Varela, que este mes de agosto ha cumplido 78 años.
Monseñor Osoro ha sido recibido entre aplausos por las numerosas personas congregadas en el Palacio Arzobispal, a las que les ha dicho: "Gracias, siempre sorprendéis y llegáis al corazón". A continuación, ha presidido el rezo del Ángelus --como solía hacer con el personal de la sede-- y el vicario general, Vicente Fontestad, ha leído la carta del nuncio apostólico sobre el nombramiento de Osoro, quien será sustituido en Valencia por el cardenal Antonio Cañizares.
También se ha producido un volteo de campanas extraordinario en el Miguelete, donde seis campaneros han efectuado un toque específico de nombramiento de Arzobispo escasos minutos después de hacerse oficial.
El prelado ha leído en este acto una carta a los valencianos, a los que ha expresado su "afecto" y "gratitud" por los años al frente de la diócesis, en los que ha experimentado su "afecto, consideración y cercanía". "Habéis llegado a mi corazón muy profundamente", ha manifestado, para explicar que en este tiempo ha intentado "darse a si mismo" como recomendaba San Agustín y ha pedido "perdón" por las "deficiencias, debilidades y pecados" que haya podido tener.
"EL CARLOS OSORO QUE VINO Y EL QUE SE VA ES DISTINTO"
En la rueda de prensa posterior, ha confesado que "el Carlos Osoro que vino y el que se va es distinto" porque se lo lleva "todo" de Valencia, "la vida de un pueblo" que le ha "regalado lo que era, no sólo sus ideas, también personas, afectos, su casa, sus costumbres" y también un "tremendo cariño" que le ha acompañado en "unos años de un gran crecimiento personal".
De su sucesor, Antonio Cañizares, ha destacado que es "un hombre bueno y siempre de Dios, que ha querido realizar y construir siempre la cultura del encuentro" y tiene "prudencia, fortaleza, valentía, firmeza, misericordia y un celo para guiar al Pueblo de Dios y estar cerca de todos, suscitando siempre esperanza", al tiempo que ha pedido a los valencianos que le reciban "con alegría".
ALUMNO DE CAÑIZARES Y ROUCO EN SALAMANCA
Posteriormente, ha indicado en rueda de prensa que son "muy amigos desde hace muchos años", desde que fuese alumno suyo en Salamanca, al igual que lo fue de Rouco Varela, en un periodo del que asegura guardar "un recuerdo, agradecimiento y afecto sincero".
El prelado ha llamado al cardenal Cañizares en presencia de todos los asistentes y le ha dejado un mensaje en su buzón de voz: "Antonio, tienes aquí a muchísima gente que te quiere y te espera". Poco después, ha atendido la llamada desde Roma de un obispo de Cuba.
Monseñor Osoro ha agradecido su labor a los sacerdotes, que ha sentido como "verdaderos hijos, hermanos y amigos", a los diáconos, seminaristas, rectores y formadores, a los miembros de la vida consagrada en sus múltiples expresiones de vida activa y contemplativa y también a los laicos cristianos. "Qué bien sonaba a mis oídos lo que las mayores algunas veces me decían en la calle: 'bonico', ¿está contento?", ha comentado.
El prelado ha querido hacer "una mención especial a los jóvenes", que han recibido estas palabras con un nuevo aplauso, y les ha animado a "ser valientes y seguir la aventura que Cristo propone", para después citar al movimiento Junior MD, a los Scouts, a los Movimientos de Familia y a todas las asociaciones y movimientos.
"Os pido a todos que recéis por mí y por mi ministerio episcopal. Aprendí mucho con vosotros, intentaré no dejaros en mal lugar", les ha trasladado monseñor Osoro, quien se ha despedido con un agradecimiento a las autoridades autonómicas y municipales, a los diversos grupos políticos, a las autoridades miembros del mundo académico, judicial y cultural.
MENCIÓN ESPECIAL A JÓVENES, INMIGRANTES, ENFERMOS Y PARADOS
Posteriormente, ha leído una misiva para su nueva archidiócesis, en la que ha dedicado "un saludo especial a los jóvenes", a quienes citará para tener un encuentro con él cada mes e invita a "tener el atrevimiento de decir en este mundo que es bueno ir con Jesús". "Hay que jugarse la juventud por grandes ideales, entre ellos por hacer presente la Vida. Esta apuesta hace grande el corazón, de tal manera que así en él entran todos los hombres". "No tengáis miedo de soñar con cosas grandes. Dejaos acompañar por Jesucristo", les ha dicho.
Además, ha manifestado que "en Madrid hay muchos inmigrantes" y los cristianos deben "hacer ver que nadie es extranjero en el Pueblo de Dios", al tiempo que ha tenido "un recuerdo especial por los que están sufriendo más, entre ellos los enfermos y quienes están sin trabajo, que afecta a tantos jóvenes y familias".
"Siempre y juntos, tenemos que buscar movernos por criterios de justicia social y no por concepciones economicistas". "La versión del hombre que nos da el Señor tiene tal fuerza de transformación del corazón y de todas las realidades en las que nos movemos que tenemos que ser valientes para hacerla presente, tengamos pasión por crear la cultura del encuentro", ha afirmado en su carta a los madrileños.
