La Policía desmantela en un chalé de Godelleta un centro de producción en cadena de billetes falsos

Actualizado: jueves, 4 junio 2009 12:52

Los agentes intervienen falsificaciones de billetes de 20 por un importe de más de 185.000 €

VALENCIA, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Policía Nacional han desmantelado un centro de producción de billetes de euro falsos en España, ubicado en un chalé de grandes dimensiones, aislado del resto de los vecinos, situado en la localidad valenciana de Godelleta, según informó hoy la Jefatura Superior de Policía. El destino del dinero era la distribución en la Comunidad de Madrid y la Comunitat Valenciana.

En el inmueble, los agentes intervinieron maquinaria industrial empleada para elaborar en cadena las falsificaciones y reproducir las medidas de seguridad de los billetes. En total, la Policía ha detenido a cuatro personas y ha localizado copias de billetes de 20 euros ya terminadas por un importe de más de 185.000. Además, contaban con material preparado para producir 10.000 unidades más de la misma falsificación.

Las investigaciones dieron comienzo nueve meses atrás, cuando la Policía Nacional detectó la aparición de billetes falsos de 20 euros en diferentes puntos de la costa. Los agentes sometieron a análisis estos billetes y comprobaron que se trataba de una falsificación de "alta calidad", y que posiblemente pudiera haber sido producida en España.

Las pesquisas guiaron hasta un grupo organizado, asentado en la Comunitat Valenciana, que podría ser el responsable de la producción de las falsificaciones. Los agentes identificaron al líder del grupo y encargado de la impresión final de los billetes falsos. Tras meses de investigaciones, constataron que tan sólo él y su mujer conocían la ubicación del centro de producción, que ocultaban a familiares e incluso al resto de miembros del grupo.

La organización disponía de un inmueble en la localidad de Godelleta (Valencia), donde se producían los billetes. Se trata de un chalé "de grandes dimensiones" y en cuyas habitaciones se repartía la maquinaría para la fabricación. La vivienda estaba situada en una zona tranquila, aislada del resto de los vecinos, "para no levantar sospechas con los ruidos y a salvo de miradas indiscretas, por lo que resultaba idóneo para la actividad delictiva y la detección de una eventual vigilancia policial".

MOMENTO DE LA INTERVENCIÓN

Los investigadores decidieron intervenir, para evitar que ningún billete falso fuera introducido en el circuito económico, cuando el grupo había finalizado la elaboración de una gran cantidad y preparaban una próxima.

En el interior del chalé, los agentes hallaron diferente maquinaria industrial usada para elaborar las copias y reproducir las medidas de seguridad con las que están dotados los billetes de euro. Esta maquinaria tenía "gran tamaño y valor económico" y había supuesto una gran inversión para el grupo desarticulado.

Además, encontraron más de 9.250 falsificaciones de 20 euros y material para producir 10.000 más, escondidos por toda la casa en armarios o debajo de las camas, entre otros lugares.

Tras efectuar dos registros domiciliarios más, los agentes encontraron billetes en diferentes estadios de la producción. Al igual que en una cadena en serie, que era necesaria para producir la cantidad de falsificaciones que llevaban a cabo, los billetes pasaban por diferentes máquinas, en algunas mediante cintas mecánicas, que los imprimían, secaban y guardaban.

Los investigadores confirmaron la capacidad de evolución del grupo ya que a lo largo de la investigación las falsificaciones habían sido "perfeccionadas" para intentar imitar "con aún mayor fidelidad las medidas de seguridad", según la Policía.

Los agentes detuvieron a cuatro personas, entre las que se encuentran el líder e impresor, así como el encargado de la distribución en Madrid. Entre los principales efectos intervenidos, se encuentran una impresora láser, guillotinas manuales e industriales, máquinas de impresión, compresores, ordenadores, tintas, papel o entre otros.

La operación ha sido desarrollada por agentes de la Brigada de Investigación del Banco de España, de la Comisaría General de Policía Judicial, junto con el Grupo de Delincuencia Económica de la Jefatura Superior de Policía de la Comunitat Valenciana, que contaron con el apoyo de especialistas de la UDEF Central.