El Síndic defiende que se eliminen los olores del centro de residuos y un aumento de las medidas correctoras

Actualizado: domingo, 18 julio 2010 13:41

VALENCIA, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Síndic de Greuges, José Cholbi, recomienda al Ayuntamiento de Alicante y a la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda que en el procedimiento que actualmente se está tramitando sobre la autorización ambiental integrada (AAI) para la ampliación del centro de tratamiento de residuos sólidos urbanos (RSU) de Alicante se adopten los acuerdos que estimen necesarios para lograr que se apliquen las medidas correctoras adecuadas para eliminar los olores generados por esta instalación. Defiende que la necesidad de incrementar las medidas correctoras ante la posible ampliación de la AAI "es más que evidente".

La recomendación de Cholbi también va dirigida a eliminar la contaminación acústica provocada por el "intenso tráfico de camiones de gran tonelaje que injustamente están soportando los vecinos afectados, cuyos derechos constitucionales a la inviolabilidad del domicilio, a la protección de la salud, a un medio ambiente adecuado y a una vivienda digna están siendo vulnerados", afirma el Síndic en un escrito consultado por Europa Press.

Asimismo, el alto comisionado de las Corts defiende que se tenga en cuenta la voluntad manifestada por la unanimidad de los concejales integrantes del pleno del Ayuntamiento de Alicante de que la planta, ubicada en la partida rural de El Rebolledo, no reciba residuos procedentes de otros planes zonales.

Cholbi remarca que la necesidad de incrementar las medidas correctoras ante una posible ampliación de la autorización ambiental integrada "es más que evidente, puesto que a nadie se le escapa que ello traerá consigo un aumento de los ruidos generados por el intenso tráfico de camiones de gran tonelaje que traerán más residuos al centro de tratamiento de Alicante".

El Síndic se pronuncia de esta manera en respuesta a dos quejas presentadas por la asociación de vecinos 'Amigos de Fontcalent' de Rebolledo y la Coordinadora de Asociaciones y Colectivos de Partidas Rurales de Alicante en las que manifiestan su "enérgica oposición" a la ampliación de la planta de basuras porque aumentará "todavía más las insoportables molestias que están padeciendo diariamente en sus viviendas por los fuertes olores emanados del vertedero y los constantes ruidos generados por el intenso tráfico de camiones de basura durante todo el día y toda la noche".

Señalan que el centro de tratamiento ha multiplicado en los últimos años las toneladas de basuras que recibe y que éstas proceden "incluso" de las provincias de Valencia y Castellón. Se trata de una situación que, según los vecinos, "no se puede tolerar por insolidaria con la ciudad de Alicante, ya que las plantas de basura deben estar cerca de los puntos donde se generan los residuos, de manera que la basura producida en Valencia y Castellón debe ser depositada y tratada en dichas provincias y no, por el contrario, en la ciudad de Alicante".

"BENEFICIO ECONÓMICO ATÍPICO"

En relación con los motivos justificativos de la ampliación de la planta, el Ayuntamiento remitió al Síndic un informe en el que indica que ni el pliego municipal de prescripciones técnico-particulares del tratamiento y eliminación de residuos urbanos ni el Plan Integral de Residuos de la Comunitat no prohíben que en las instalaciones de Alicante entren residuos urbanos de otros planes zonales, algo que, además, recalca el Consistorio, produce un "beneficio económico atípico" que beneficia a todos los vecinos del término municipal.

Asimismo, el Síndic precisa que ni el Ayuntamiento ni la Conselleria contestaron su requerimiento para que detallaran las localidades cuyos residuos son depositados en la planta de basuras de Alicante.

En relación con los olores, el Ayuntamiento de Alicante informó de que se han hecho siete inspecciones de olfatometría. En los caminos de la Ballestera y Rebolledo-El Fardacho, el olor ha sido siempre el de la vaquería o ganado. Para saber que hay tratamiento de basuras, desde el punto de vista de olores, "hay que ponerse junto a la valla del lixiviado [líquido que procede de las basuras], pues más lejos desaparecen", según el Consistorio, que añade que las dos ganaderías existentes emiten "muchos más olores que las instalaciones municipales de tratamiento y eliminación de residuos urbanos".

Por su parte, la Conselleria remarca que en la autorización ambiental integrada se describen las medidas adoptadas por la instalación para evitar la propagación de olores, pero el Síndic advierte de que no se dice "nada" sobre si se han realizado inspecciones recientemente para comprobar el grado de cumplimiento de las medidas correctoras o sobre si éstas son o no suficientes para evitar al máximo posible los olores.

128 CAMIONES AL DÍA

Por otro lado, el Ayuntamiento de Alicante señala en su informe que del 1 al 14 de marzo de 2010, entre las 8.00 y las 00.00 horas circularon una media de 67 camiones al día --941 camiones en total-- y entre las 00.00 y las 8.00 horas, una media de 61 camiones --857 camiones--, lo que da una media de 128 camiones en un solo día.

Medio Ambiente dice, al respecto, que durante la tramitación de la autorización ambiental integrada se solicitará a la empresa las medidas para disminuir las molestias debidas al tráfico de camiones hasta la planta.

Por su parte, los vecinos afectados reiteraron al Síndic que las molestias son "insoportables". Especificaron que las inspecciones realizadas por el Ayuntamiento para comprobar los olores se efectuaron antes de las 13.00 horas, "cuando siempre han denunciado que las molestias más intensas se producen sobre todo por la noche".

Además, criticaron que el Consistorio "se base en la opinión subjetiva de una sola persona, empleada municipal, para sostener que no existen molestias por olores del centro de tratamiento de residuos sólidos urbanos de Alicante".

En cuanto a la contaminación acústica generada por la intensa circulación de camiones, los vecinos señalaron que el Ayuntamiento reconoce que pasan, aproximadamente, unos 128 camiones al día. En muchos casos, esos camiones son de 25 toneladas, cargados de basura compactada, que generan "una gran cantidad de olores y ruidos".

El Síndic defiende que el centro de tratamiento de residuos urbanos de Alicante "debe funcionar, en todo momento, con unas adecuadas y eficaces medidas correctoras que eviten al máximo posible la generación de molestias" y destaca que los tribunales "vienen declarando con reiteración que los fuertes olores y los ruidos inciden perniciosamente sobre el derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio y los derechos constitucionales a la protección de la salud, a un medio ambiente adecuado y a una vivienda digna", por lo que resulta "de todo punto ineludible su firme protección por parte de los poderes públicos".

Además, afirma que aunque no puede "dejar de reconocer la actividad desarrollada hasta el momento por el Ayuntamiento de Alicante y la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda para intentar evitar al máximo las molestias", considera que deben "extremarse los esfuerzos para controlar en todo momento que las medidas correctoras son suficientes y se cumplen correctamente".