VALENCIA, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -
La conselleria de Territorio y Vivienda ha realizado el censo oficial de tejos de la Comunitat Valenciana con una cifra que alcanza los 6.541 ejemplares, según informaron hoy fuentes de la Generalitat.
El análisis se realizó en el marco del proyecto LIFE de Gestión y Puesta en Valor de tres Hábitats de Alta Montaña, que ejecuta este departamento. En él se llevó a cabo un "profundo" estudio para la caracterización de las poblaciones de tejo (Taxus baccata) en los Lugares de Importancia Comunitaria (LIC) de Penyagolosa, Alt Maestrat, Puebla de San Miguel, Mariola-Font Roja y Aitana.
El titular de Territorio, Esteban González Pons, aseguró que "los resultados obtenidos arrojan nueva luz sobre la situación de este árbol en el ámbito de la Comunitat, lo que ha superado con creces las previsiones más optimistas".
Se partía de un censo realizado en el año 2001 que evaluaba los efectivos de la especie en un total de 882 individuos para todo el territorio de la autonomía valenciana. Con los resultados actuales, sólo los efectivos de la población del Barranc del Mas Roig (Penyagolosa) casi multiplican por cuatro esta cifra.
González Pons afirmó que estos datos "ponen de manifiesto que la situación de la especie en el territorio no es tan crítica como se ha supuesto en ocasiones, aunque es cierto que el estudio ha confirmado el elevado riesgo de extinción de algunas poblaciones, especialmente las de la provincia de Valencia".
Según las mismas fuentes, se debe tener en cuenta, además, que este estudio no abarca la totalidad de la Comunitat, y si bien en las provincias de Valencia y Alicante no es previsible encontrar un número "altamente" significativo de poblaciones fuera de los LIC estudiados, en la provincia de Castellón faltan por censar y caracterizar "importantes" territorios donde abunda el tejo, como son la Sierra del Toro y las comarcas de Els Ports, el Baix Maestrat y la Tinença de Benifassar.
En este sentido, el conseller indicó que "a falta de estudiar en detalle esta zonas, se puede hacer una estimación aproximada de unos 10.000 ejemplares en toda la autonomía valenciana". Asimismo, junto a poblaciones en "muy buen" estado de conservación se han localizado, igualmente, poblaciones "degradadas", sin regeneración y con problemas "acuciantes" de conservación.
Los agentes más significativos en la degradación de las poblaciones demuestran ser la presión del ganado y de los herbívoros silvestres, mientras que la principal amenaza global para la especie es la fragmentación de las poblaciones, con aislamiento de pies masculinos y femeninos, de manera que el polen no consigue llegar a las flores femeninas y, por lo tanto, no se forman semillas capaces de producir nuevas plantas.
También se ha comprobado que la germinación de semillas se desarrolla en lugares que, con las condiciones de humedad adecuadas, se encuentran protegidos por la presencia de plantas espinosas y con frutos "carnosos".
Estas plantas actúan como vallas naturales que impiden que el ganado o los herbívoros silvestres devoren los brotes, además de servir como lugares de concentración de aves que se nutren de dichos frutos y donde depositan sus excrementos con semillas de tejos previamente ingeridas en algún árbol cercano.
CONSERVACION
Por ello, como acción de conservación para localidades con regeneración natural degradada por herbívoros, se lleva a cabo la plantación de especies silvestres espinosas que crean un vallado natural protector.
Con todo, el Programa LIFE tiene un coste previsto de un total de 1.317.000 euros y se desarrolla desde el año 2004 hasta finales del 2006. Los trabajos que se efectúan son de dos tipos, el de conservación y mejora de los tres hábitats, el de la educación y concienciación de la población local para su implicación en la protección.
El proyecto recae sobre las áreas "más elevadas" de la Comunitat, en las franjas interiores de las tres provincias, Mariola-Font Roja y Aitana-Serrella-Xortà-Puig Campana, en Alicante y en la Puebla de San Miguel, en Valencia, mientras que en Castellón las cotas más altas se encuentran en las Sierras del Alto Maestrazgo y Penyagolosa.
Estos cinco sistemas montañosos sobre los que se está actuando son LIC debido sus valores ecológicos y porque albergan tres hábitats de gran importancia, como son Tejeras, Pinares Nagrares y Sabinares Albares.
González Pons señaló que este proyecto "tiene un doble objetivo, de tal forma que, por un lado, se pretende preservar los valores ecológicos de los ecosistemas de interior y, por otro, buscar la implicación de los habitantes de esas áreas en los recursos naturales para evitar la despoblación del medio rural".
