VALENCIA, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
La candidata socialista a la alcaldía de Valencia, Carmen Alborch, afirmó hoy su voluntad de hacer del consistorio valenciano un "ayuntamiento de cristal, irrompible" en el que "entre la luz", y todas las personas sientan que "esa es su casa", al tiempo que se mostró "absolutamente convencida de que el cambio es posible" con el "esfuerzo de todos".
Alborch, que participó hoy en un acto público celebrado en Valencia, al que también asistieron el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el secretario general del PSPV-PSOE y candidato a la Presidencia de la Generalitat valenciana, Joan Ignasi Pla, pidió a los asistentes "todo el entusiasmo" para lograr "que seamos realmente capaces de recoger esas ansias de cambio que hay en la sociedad valenciana".
La candidata socialista al consistorio valenciano manifestó su voluntad de "encabezar el cambio en la ciudad" y "sumar las ilusiones" de los ciudadanos, y hacerlo "con un grupo socialista que está haciendo una oposición eficaz, para que vayamos avanzando y vayamos viendo cuál es la ciudad que nosotros soñamos", aseveró.
Alborch afirmó que quiere "ser partícipe de las ilusiones, sueños y anhelos" de la ciudadanía, al tiempo que reiteró su voluntad de "ser la alcaldesa de Valencia, de una ciudad --dijo-- que no puede ni quiere renunciar a ser el 'cap i casal', por eso queremos a Joan Ignasi Pla como presidente de la Generalitat", afirmó.
Insistió en que "el cambio es posible", ya que, según destacó, "la fuerza del voto es importantísima y con ella podemos cambiar la sociedad". En esta misma línea, afirmó que "la política transforma nuestras vidas y tenemos que poner lo mejor de nosotros para cambiar el mundo".
La candidata socialista, que aseguró tener "muchísimas cosas que contar", pidió "fortaleza" para afrontar la "necesidad de cambio existente", y afirmó que "hay que valientes para propiciar" ese cambio en Valencia y en la Comunitat, "valientes --insistió-- como Zapatero, que lo ha sido para traer tropas de Irak, sacar adelante el proyecto de ley de violencia de género, la de autonomía, y la de igualdad, y por estar a la altura de las circunstancias y de la esperanza de paz que tiene el pueblo español", aseveró.
Manifestó que "después de 15 años" de gobierno del PP en la Comunitat "la gente no puede más", y apuntó que van "a formar gobiernos siguiendo el ejemplo de los alcaldes socialistas que tienden la mano y no dan la espalda a la ciudadanía" y que están "en contacto con la gente"
"CIUDADES PARA SER VISITADAS"
Alborch manifestó que el PP ha creado "ciudades para ser visitadas" y no "para ser vividas", y añadió que hay que "afrontar los retos del siglo XXI", algo que, a su juicio, no puede hacer el PP porque "no ha hecho los deberes del siglo XX" y ha convertido Valencia en una "ciudad oculta e inacabada".
Asimismo, aseguró que recorrerán "todos los barrios" para "estar con el movimiento ciudadano, porque cuando éste ha tomado la palabra hemos hecho los mejores proyectos", resaltó, al tiempo que destacó las numerosas plataformas ciudadanas que "están levantando la voz contra los gobiernos del PP" y el "desastre urbanístico".
Por otro lado, remarcó que es "imprescindible" sustituir "el actual talante de crispación" por uno nuevo de "optimismo e ilusión", por un "espíritu de conciliación y acuerdo", dejando de lado, añadió, "el enfrentamiento y el victimismo que no favorecen a los valencianos", para lograr así un clima de "acuerdo y cooperación", subrayó.
Añadió también su voluntad de "hablar con los jóvenes, que tienen derecho a viviendas dignas, y a poder trazar su proyecto de vida con autonomía", algo que calificó como "absolutamente imprescindible", y de hablar con las mujeres, que son "las que más patean las ciudades, sufren el transporte y tienen que cuidar a los mayores haciendo compatibles dobles y triples jornadas".
Finalmente, apostó por conseguir una sociedad "con muchísimo más bienestar" y tratar de ser "los más y mejores educados, los que vivamos en las ciudades más cordiales y habitables, apostando por la no segregación, la cultura, y escuchando a las universidades, las asociaciones y al movimiento ciudadano", concluyó.
