VALENCIA, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, destacó la "buena gestión" y el "uso racional" del agua que se hace en la ciudad y aseguró que en la capital "no se malgasta" este recurso sino que se utiliza de forma "racional". En este sentido, valoró la implantación de sistemas de riego "inteligente" como el instalado en los jardines de la zona sur de la capital, que permiten controlar las frecuencias de riego, su suspensión ante la presencia de lluvias y la detección de cualquier fuga o avería.
Barberá, que ofreció la rueda de prensa en la que se dieron a conocer los temas tratados en la Junta de Gobierno Local celebrada hoy en el consistorio valenciano, comentó que en esta reunión se aprobó el programa de mantenimiento de los jardines de la zona sur de la ciudad. Aseguró que con ello se implanta en este área un nuevo sistema de control de riego "inteligente" a propuesta de la contrata encargada del cuidado y mantenimiento de estas zonas verdes, la Sociedad Agricultores de la Vega (SAV).
La primera edil, que valoró la puesta en marcha de este tipo de iniciativas, señaló que el sistema implantado en los jardines de la zona sur, llamado 'Tigris', permite llevar a cabo "un riego racional e inteligente". En este sentido, manifestó la "preocupación" de la administración municipal por "gestionar al máximo, con la mayor eficacia, el agua" y apuntó que el 'Tigris' es una muestra de la voluntad de "controlar más el uso del agua".
Recordó, asimismo, que en la ciudad de Valencia no se utiliza agua potable para el riego de jardines sino agua proveniente de pozos, por lo que destacó el "uso perfecto" que se hace de este recurso, frente a las "críticas" realizadas en este sentido por la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, dijo.
La alcaldesa comentó que el sistema 'Tigris', que se basa en la tecnología de comunicación GPRS, se ha instalado ya en 40 jardines de la zona sur de Valencia, en concreto, en espacios como la plaza del Ayuntamiento, la plaza de la Reina, las Alameditas de Serranos o la avenida de los Hermanos Maristas.
Rita Barberá explicó que esta iniciativa posee "una unidad central de gestión y control que programa de forma remoto, a distancia, las frecuencias del riego, si se amplían o se reducen, o si se anula en momentos de lluvia".
Apuntó que esta unidad "también recoge datos históricos de consumo de agua" y destacó que ello permite también "comprobar el funcionamiento de las válvulas" y detectar la existencia de fugas. Asimismo, indicó que cuenta con unidades en cada jardín que transmiten información a la unidad central, y con sensores externos que entre sus funciones tienen la de detectar si llueve o no, dijo.
La primera edil valoró la posibilidad que recoge el 'Tigris' de "paralizar el suministro de agua" si se rompe por cualquier circunstancia el sistema. Comentó que contempla la posibilidad de remitir un "mensaje de alarma" a los trabajadores de la empresa encargada del mantenimiento de jardines para alertarlos de la anomalía detectada. Agregó, por otro lado, que el sistema tiene baterías que son autónomas y que funciona sin electricidad.
