Rafael Azcona asegura que, aunque entró en el cine "por casualidad", hoy forma parte de su vida

Actualizado: domingo, 19 marzo 2006 21:30


MALAGA, 19 Mar. (EUROPA PRESS) -

El guionista Rafael Azcona aseguró hoy que, aunque entró en el cine "por casualidad", ahora "forma parte de mi vida". "A mi el cine no me gustaba", indicó, y añadió que "empecé a escribir porque no tenía habilidades físicas y me refugié en la lectura".

Azcona, Premio Ricardo Franco de la novena edición del 'Festival de Málaga. Cine Español', recordó que "cuando se cruzó delante de mi esa cosa que se llama el amor por una chica, yo, trascendido por mis lecturas, intenté que me pasara a mi lo mismo que le pasaba a los protagonistas de las novelas".

Explicó que empezó a escribir a mano, aunque poco después ese decidió por alquilar una máquina de escribir alemana, "que para darle a una tecla había que hacerlo con un martillo", perdió varias en el avión, y después se compró "a plazos" una máquina eléctrica, hasta que "por fin" llegó el ordenador, y "ya no es tan penoso escribir porque el esfuerzo físico es mínimo".

Según Azcona, llegó a Madrid con la pretensión de ganarse la vida escribiendo, porque "era contable y los números me daban un dolor de cabeza tremendo". Primero escribió novelas rosas y por cada 100 folios le pagaban 1.000 pesetas; y más tarde comenzaría a colaborar con 'La codorniz' y había escrito "algunos libritos de humor".

"Un día me llamó un italiano diciendo que quería hacer una película sobre uno de estos libros y yo entonces no entendí por qué", afirmó, al tiempo que explicó que él no sabía nada del Neorrealismo, aunque "luego, cuando había entrado en el cine y me quise hacer con una culturita, entendí que el Neorrealismo y toda la comedia italiana de los años 60 y 70 estaba escrita por personas que habían colaborado en semanarios humorísticos italianos".

Azcona dijo que "siempre he trabajado para directores estupendos, y entonces todo era facilísimo" y recordó que durante su trabajo en el cine sólo recuerda haber tenido "una temporada mala", en la que no le llamaban, y fue Mario Camus el que le rescató. Ha trabajado en España, Italia, Francia y Estados Unidos, siempre para productoras europeas, un trabajo que realiza "con mucha discreción".

Durante toda la carrera le ha gustado pasar desapercibido, pero desde que comenzó a escribir libros y los contratos le exigían "dar la cara", "pensé que era una tontería negarle al cine lo que le daba a los libros". Este es el motivo por el que ha aceptado el reconocimiento del Festival de Málaga.

Con motivo de este galardón, Bernardo Sánchez ha escrito un libro sobre el guionista, 'Rafael Azcona, hablar el guión', en el que ha reflejado lo que ha conocido de él a través de las múltiples conversaciones que han mantenido. Para Azcona, este libro es "una hagiografía, la vida de un santo", en la que además, está "todo a favor". "Empiezo a leerlo y me pongo colorado", afirmó.

"Yo soy de una soberbia satánica", consideró el guionista, pero "soy como un gato muy viejo y cuando me pasan la mano por el lomo, yo ronroneo". Así, alabó el talento de Sánchez, "que ha tenido el talento de justificar los piropos que me dedica".

Por su parte, el director del festival, Salomón Castiel, agradeció a Azcona que haya aceptado este galardón después de llevar varios años insistiéndole para que lo hiciese. Asimismo, afirmó que este reconocimiento es "uno de los actos más importantes de la historia del 'Festival de Málaga. Cine Español'".

Rafael Azcona recibirá el Premio Ricardo Franco en una gala que tendrá lugar a las 21.30 horas en el Teatro Cervantes de la capital, que estará presentada por Maribel Verdú, y a la que está prevista la asistencia de Agustín Díaz Yanes, Alex de la Iglesia, José Luis García Sánchez, José Luis López Vázquez y Fernando Trueba, entre otros. Además, se proyectará la quinta película de la Sección Oficial de Largometrajes a Concurso, 'El triunfo', de Mireia Ros.