Emilio Lledó destaca la amistad pura y entrañable que le unía a Lázaro Carreter al recoger el premio que lleva su nombre

Actualizado: lunes, 8 octubre 2007 22:30


MADRID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -

El filósofo Emilio Lledó recogió hoy en Madrid el II Premio 'Fernando Lázaro Carreter', que otorga la Fundación Germán Sánchez Ruipérez, y que está dotado con 25.000 euros y una escultura de Rafael Canogar. El galardonado agradeció el premio y destacó la "amistad pura" que le unió al académico, así como lo "entrañable" de su persona. El acto de entrega tuvo lugar durante una comida a la que también asistieron el ministro Cultura, César Antonio Molina, y el director de la Real Academia Española (RAE), Víctor García de la Concha, entre otras personalidades.

Lledó, premiado por su contribución a mantener viva la memoria del eminente intelectual fallecido en 2004, quiso "clavar un dardo en la memoria" con su discurso por este premio, cuyo nombre le trajo a la memoria "ecos de la vida" de alguien al que dijo "admirar mucho".

El galardonado ensalzó los valores de la amistad y el amor, y su relación con la palabra y la comunicación. "La amistad es lo más necesario de la vida", señaló, recordando, no obstante, que es una palabra que tiene facilidad para "corromperse por respingos del interés".

Lledó matizó que tanto la amistad como el lenguaje "son dos virtudes", momento en el que recordó cuando conoció en los años 50 a Lázaro Carreter, con quien entabló "una amistad pura". "Tuvimos un trato continuo y siempre entrañable", matizó Lledó, calificando al que fuera director de la RAE de "arquero del lenguaje".

"SOMOS LO QUE HABLAMOS"

"Vivir es dialogar con el presente y con el pasado. Somos lo que hablamos, por eso hay que reflexionar lo que decimos", agregó, subrayando que "las palabras son cristales a través de los cuales vemos la vida y espejos en los que mirarnos".

En su turno, el ministro de Cultura ensalzó la figura del profesor Lledó, "en el que se combinan en proporción equilibrada y perfecta, el amor a la filosofía, el amor a la historia, el amor al lenguaje y el amor a la sociedad". "Su vida y su obra son un ejemplo de esa lucha constante puesta al servicio del hombre contemporáneo", añadió Molina, que formó parte del jurado de este premio en su anterior condición de director del Instituto Cervantes.

"INSACIABLE CURIOSIDAD"

Germán Sánchez Ruipérez hizo hincapié en la "rebeldía y la insaciable curiosidad" del premiado, en cuyo corazón "habita un machadiano de verdad". Además, destacó el amor por la libertad, la persona, la palabra y la lectura del homenajeado. Mientras, el presidente del Jurado, José Manuel Blecua, recordó la "extraordinaria dimensión ética" de Lledó, designado por unanimidad del jurado.

A la entrega de este galardón, que se celebró en un conocido hotel madrileño, asistieron la Infanta Margarita y su esposo el Duque de Soria. También estuvieron presentes, entre otros muchos, el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón; la directora del Instituto Cervantes, Carmen Caffarel; el presidente del Patronato del Museo del Prado, Plácido Arango; el director general del Libro, Rogelio Blanco; así como los periodistas Iñaki Gabilondo y Juan Cruz, o los escritores Luis Mateo Díez, Luis Alberto de Cuenca y Gustavo Martín Garzo.