SEVILLA, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
El director del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (Inaem), Juan Carlos Marset, sostuvo hoy que una de las impresiones extraídas de la clausura del Foro Estatal de las Artes Escénicas ha sido la existencia de "muchos agravios comparativos" entre las diferentes artes.
Marset argumentó que probablemente el teatro está "tradicionalmente más considerado" que la danza clásica o que la musica contemporánea, por lo que planteó la necesidad de aplicar las fórmulas de las disciplinas con más reconocimiento a aquellas menos afortunadas.
De igual modo, puso de manifiesto la necesidad de que en los sectores que se consideran "más desfavorecidos" se introduzcan correctivos que, tanto en el ambito territorial como el sectorial, favorezcan a los que están en desventaja, haciendo especial hincapié en materias como la música o la danza contemporánea. Todo ello ha de realizarse, según matizó, "escuchando siempre a los agentes a los que les afecten".
Asimismo, señaló que hace falta "continuidad y sostenibilidad" en las políticas para que los proyectos y los acuerdos se traduzcan en "compromisos a largo plazo". No obstante apuntó que, a su entender, existe una voluntad de que la corresponsabilidad "se defina claramente" para llegar al establecimiento de los citados proyectos a largo plazo.
Al hilo, expuso que, tras el foro, se elaborará un documento "quasi definitivo" que también se remitirá a las diferentes asociaciones, manifestando al punto su esperanza de que "empiecen a andar con paso firme" en España las políticas de ayudas y equipamientos de nuevas generaciones y la aplicación de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación al archivo y a la retransmisión del teatro, la música y la danza.
Por otra parte, los moderadores de las tres mesas sectoriales expusieron en la clausura las principales conclusiones extraídas de la jornada. Así, la responsable de la mesa de trabajo de la danza, Laura Kumin, comenzó por reconocer y apoyar el impulso de cambio del foro, así como la necesidad de estudiar el contexto específico de los proyectos referidos a la danza.
De igual modo, puntualizó que la pluralidad y la diversidad de los proyectos "no siempre refleja" la situación por la que atraviesa la danza en este país, al punto que defendió la creación de una oficina de diagnóstico y seguimiento del estado de la citada disciplina en la situación actual.
Al hilo, resaltó que la cultura que no es comercial ni de mercado tiene "efectos más profundos" en la sociedad de los que se reconocen y que hay que poner en valor el reconocimiento y la potenciación de aspectos intangibles como la economía de la cultura.
Kumin incidió en que "no hay un público sino muchos públicos", así como en que se puede vivir la realidad escénica "más allá del patio de butacas". Igualmente, reivindicó la necesidad de que existan espacios de creación y de que los baremos de valoración de los proyectos no se basen en factores de competencia de mercado, sino en la medición del "valor real" de los proyectos.
Tras pedir ayudas estructurales a los conjuntos de proyectos, así como la flexibilización de las normas jurídicas para conseguir ayudas, la representante del mundo de la danza reclamó que éstas "no dependan del signo político" y que se establezca un diálogo entre los diferentes ministerios, así como que se concreten las subvenciones para "no dejar la danza abandonada" a los cambios políticos.
Por su parte, el moderador de la mesa de la música, Javier Rozas, puso de relieve la necesidad de fórmulas de financiación reintegrables, de liquidaciones trimestrales de las ayudas y de que se otorguen convenios plurianuales con una franja de entre tres y cinco años que "den seguridad y estabilidad".
Igualmente consideró que deben abrirse ayudas al fomento de "estrategias concretas" en materia de danza, si bien aclaró que también es "muy importante" potenciar la estructura musical, la formación del gestor de proyectos y del propio músico, cuya figura es necesario "dignificar".
Por ello, defendió la creación de un Estatuto del Intérprete y de estrategias de educación y difusión en la enseñanza en la escuela. "Hay que ampliar el censo de salas y desarrollar la disponibilidad y gestión de las salas existentes, que deben estar dotadas de equipamientos específicos para la música", aseveró.
Con estos argumentos, alentó al Inaem a coordinar medidas de protección para los intérpretes españoles y sostuvo que hay que ser "muy ambicioso" con la ley de mecenazgo, que ha de ser "interesante y atractiva". Para terminar, abogó por el desarrollo del asociacionismo y de una ley de la música en la que ésta tenga "su propia personalidad".
De otro lado, el coordinador de la mesa de teatro, Juan Ruesga, apostó por poner más énfasis en la gestión de la atención al público, junto a la agilización administrativa en la tramitación y el pago de las ayudas.
En ese sentido, afirmó que se trata del "momento oportuno" para hacer política cultural y expresó sus dudas sobre la posibilidad de coordinación entre las distintas administraciones del Estado. Finalmente, reclamó una inversión pública apoyada por líneas básicas de política cultural.
Finalmente, la representante de la mesa del circo y presidenta de 'Payasos Sin Fronteras', María Colomer, calificó de "fundamental" el Estatuto del artista para el circo y constató que el problema fundamental de éste es la "necesidad imperiosa" de reconocimiento público como actividad cultural de una manera "efectiva", así como una intervención estatal "clara".
