"El arte siempre dulcifica la realidad", afirma Manuel Vicent, que vuelve a la novela con 'León de ojos verdes'

Actualizado: jueves, 13 noviembre 2008 22:00


MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -

"El arte siempre dulcifica la realidad", afirmó hoy Manuel Vicent, que vuelve a la novela con 'León de ojos verdes' (Alfaguara), ambientada a principios de los años 50, y que describe la vida de personajes reales e imaginarios en torno a un hotel (real) en la Playa de Benicàssim.

"(En esta obra) ya no sé qué es real y qué es ficción pues la memoria se confundió con la imaginación", argumentó el escritor en una entrevista con Europa Press. "La realidad es mucho más cruel que la literatura. Una tragedia bien escrita y bien descrita proporciona una emoción estética que hace que el lector se olvide del hecho trágico. El arte siempre dulcifica la realidad", explicó el autor y periodista.

Vicent (Villavieja, 1936) emplea la excusa del rodaje, en el Hotel Voramar, de una película ambientada en el periodo de entreguerras para mostrar, a través de los ojos de Manuel, un joven aprendiz de literato, la historias de algunos de sus clientes. "Es lo que se llama 'novela de aprendizaje', descrita por el protagonista, aspirante a escritor", clasificó. "En ella, los personajes se cruzan en un mismo lugar y bajo una misma mirada", detalló Vicent.

HISTORIAS DE AMOR Y EL BULLICIO DE BARDOT

Entre los personajes, se encuentran un asesino, un viejo doctor barojiano, un pez gordo franquista, un coronel navegante, una joven y desconocida Brigitte Bardot (que, adolescente, provoca bullicio entre los huéspedes con su belleza y bikinis osados), así como el recuerdo de los escritores John Dos Passos y Dorothy Parker, que pasaron por allí y que alientan las ansias escritoras del protagonista.

Historias de amor reales inspiraron a Vicent, que retrató desde María, una cocinera del hotel cuyo marido fue fusilado durante el franquismo, hasta el ingeniero Gabriel Casamediano, que vivió un romance de décadas en secreto a través de cartas con una colombiana. "¿Qué es real y qué es literario? Ésta es la eterna cuestión", aseguró el autor.

ESCRITOR "24 HORAS"

"Para escribir, hay que sufrir. No comprendo cuando algunos autores dicen que disfrutan mucho escribiendo", reveló Vicent sobre el acto de pasar las ideas al papel. "Raramente se produce esta perfecta conjunción entre lo que se siente y se piensa y lo que se desliza a través de la pluma", confesó, revelando, sin embargo que la actividad también produce mucho placer.

"Considero que un escritor está todo el día trabajando, piensa en ello 24 horas al día, pero no hace falta estar delante del ordenador. Ser escritor es pensar, vivir e imaginar", detalló Vicent, conocido por escribir muy rápido y porque no le gustar releer sus libros. "Es como volver al lugar del crimen", bromeó.

A gusto con el relato corto ("pequeñas peripecias que a la vez son las soluciones de pequeños enigmas psicológicos"), Vicent reveló que entre sus próximos proyectos está la publicación de un libro formado por una decena de cuentos titulado 'El azar de la mujer rubia'. "Puede que el hilo conductor de las narraciones sea una época o un tema, pero tiene que ser un libro trabado", concluyó.