MADRID, 9 May. (EUROPA PRESS) -
Raúl Usieto es Pecker, un músico de Huesca que en 2003 se trasladó en Barcelona, donde ha desarrollado una carrera musical que ahora ha dado a luz a su tercer disco. De título homónimo, este álbum ha sido totalmente autoproducido por él y se mueve entre el pop, lo electrónico y la música disco.
En una entrevista con Europa Press, Pecker explica que haber trabajado solo en este tercer disco "ha sido un atrevimiento impuesto por la situación" que tiene la ventaja de que uno tiene "esa sensación de tener el control total y de poder hacer lo que uno quiera". Sin embargo, reconoce que "acostumbrado a trabajar con el feed-back de otras personas" hay momentos en los que pensaba "a ver por dónde iro". Aún así, "repetería".
'Pecker', publicado en abril, y que "en un ejercicio de honestidad brutal", puede escucharse completo en la web del artista (www.pecker.es) es un disco que su autor define como "música pop". "Lo que pasa es que la palabra electrónica está ligada a lo que hago por los medios con los que trabajo, pero en definitiva es pop, lo que pasa es que a veces me acerco más al pop clásico, otras al electropop y hay momentos en que jugueteo con el trip-hop, el hip-hop o el disco", explica.
"Lo que me interesa es la música, los géneros me importan poco, lo que vale es si una canción transmite o no, más allá de encasillarla", afirma el artista oscense, que admite que tiene "un espíritu optimista" que le gusta "transmitir en las canciones": "Aunque en algunas plantee problemas o momentos angustiosos, siempre me gusta mostrar la luz, que se vea que hay una solución".
Después de 'Diez y 1 galaxia' y '2 y las nadadoras', Pecker ha evolucionado "hacia la pista de baile", resultado de la gira de su segundo disco, que produjeron los barceloneses de The Pinkertones, en la que comprobó que "la gente en el directo agradecía esos momentos más alegres para bailar y disfrutar". "Aunque también hay canciones que son más introspectivas, más intimistas o más melancólicas", añade.
"Llegar al mayor número de gente posible". Este es el primer objetivo del artista afincado en la Ciudad Condal, que señala que "hay muchísima oferta de música en el mundo", pero "a todos nos gustaría sonar en más emisoras". En este sentido, Pecker apunta que "en los medios sólo hay sitio para un pop estándar" y que "en este país sólo hay dos formas de entender la música: indie o comercial".
Sin embargo, su "falta de prejuicios a la hora de hacer música" le coloca "en un sitio que no es ni uno ni otro". "Para los indies soy demasiado comercial y para el mainstream soy demasiado indie. Yo defiendo la posición del valiente; el camino intermedio entre el pop y el indie es el camino de la música", afirma el músico, que añade que "hay gente que no puede elegir porque le meten entre oreja y oreja" cierto tipo de música.
Al margen de los grandes multiventas, Pecker dice que "se puede vivir de la música". "En muchos casos se puede malvivir o sobrevivir con la música", ironiza el músico, que defiende que si la música "es tu pasión y es lo que te gusta y trabajas", puede ser una forma de vida. Eso sí, con un horario de trabajo como el suyo, que pasa de nueve a tres en el estudio "para que si me pilla la inspiración, me pille trabajando".
